"El nuevo vial ayudará a modernizar el recinto ferial y nos permitirá albergar más eventos"

Convertir el recinto ferial Luis Adaro en un espacio del siglo XXI es el objetivo compartido por el consorcio que gestiona su futuro (Principado de Asturias, Ayuntamiento y Cámara de Comercio de Gijón y Unicaja Banco). El impulso a la creación del vial, que comunicará la avenida de Doctor Fleming con la carretera de Somió, cuyo trazado desveló esta semana LA NUEVA ESPAÑA, será clave para avanzar. Álvaro Alonso Ordás (Oviedo, 1966) es el secretario general de la Cámara de Comercio de Gijón y director del recinto ferial.

–¿Qué supone la creación del vial para el recinto ferial?

–Estamos muy satisfechos de que se den pasos. Ha sido fruto de un trabajo coordinado, de análisis de las necesidades que tenía tanto el recinto ferial como la propia ciudad, respecto a la ordenación de la movilidad de vehículos y personas en este entorno. Esta es una zona especialmente sensible a esa movilidad como entrada a Gijón, al lado de la playa de San Lorenzo, de Isabel la Católica y del propio recinto ferial. Hay que poner en valor también el rigor a la hora de analizar y estudiar las necesidades que el recinto tenía en cuestión de logística de movimiento de personas internamente para sacar el mayor rendimiento posible, porque cada vez son más los eventos que se realizan. Todo ese rigor ha dado como resultado una solución óptima y que conjuga todas estas necesidades.

–¿Es satisfactorio para el Ayuntamiento y la Cámara?

–Hay que puntualizar que la Cámara es gestor del recinto, y por tanto conocedor de las necesidades del mismo. Hemos estado de manera directa analizando estas cuestiones con el Ayuntamiento, que son quienes deciden en materia de urbanismo y movilidad. Pero es el Consorcio de Ferias de Asturias quien toma las últimas decisiones. Respecto al proyecto inicial del PGO, lo que ha habido es una variación de por dónde discurre el propio vial. En ningún caso se pierde espacio verde para la ciudad y se logra que el vial sea más eficaz para el propio recinto y también para la movilidad en cuanto a su ancho, equipamiento de aceras, espacios verdes…

–¿Obligará a modificar alguna estructura del recinto?

–El propio desarrollo del vial dará una nueva fachada y un nuevo acceso al recinto ferial, justo en frente del actual Pabellón de las Naciones. Afectará también a edificaciones e infraestructuras internas, que tendrán que modificarse, adecuarse o reubicarse dentro del recinto. Eso está valorado en torno al medio millón de euros. No es el caso del Pabellón de las Naciones, pues ni con mucho afecta el trazado.

–¿Se acometerán obras en el Pabellón de las Naciones?

–Hay un plan dentro del propio Consorcio para lograr ese recinto del siglo XXI. Por parte del Principado se ha consignado una cantidad cercana al millón de euros para este 2023 y tanto el Ayuntamiento como la Cámara hemos manifestado que estamos absolutamente alineados con ese plan de modernización. Faltaba la toma de decisión de Unicaja Banco, cuarto consorciado, que se espera que también esté en esta ampliación de capital, valorada en torno a los 14 millones de euros. Es un plan que se desarrollará en los próximos años y que incluye el Pabellón de las Naciones.

–¿Qué se va a hacer?

–Tiene muchas deficiencias y lo que se pretende es sumarle el predio contiguo, donde se pone una gran carpa durante Agropec o la FIDMA, hasta lograr una dimensión casi similar al Pabellón Central. Sería ya un pabellón con todas las infraestructuras se precisan. Y todo eso junto a otras actuaciones en el Palacio de Congresos, que precisa mejoras de adecuación eléctrica y en aspectos básicos como climatización, sonido, accesos… Muchas cosas se están haciendo ya, pero otras de mayor calado se irán llevando a cabo. También en el Pabellón Asturias, en la Lonja del Palacio, en el Atlántico, en la entrada principal… Es lo que hemos venido a denominar el recinto del siglo XXI.

–¿Hay implicación de las administraciones para hacerlo?

–Hay que trasladar el agradecimiento a Principado y Ayuntamiento porque lo están impulsando con hechos, poniendo los fondos necesarios, para que el recinto ferial de Asturias pueda dar ese salto cualitativo y cuantitativo que necesita para albergar el mayor número de eventos. Un elemento más que lo modernizará será este nuevo vial, que facilitará la compartimentación de los eventos, porque muchas veces nos vemos en la imposibilidad de juntar más de dos por el problema de los accesos. Lo necesita el recinto y lo necesita Gijón, porque es un gran instrumento de dinamización de la economía de toda la región.

–¿Cómo se prevé la actividad para este año en el recinto ferial?

–Ya tenemos programados doce congresos de distintas temáticas y diez ferias y otras citas. En suma, hay 52 eventos ya cerrados, lo que supone estar por encima de los 200 días de actividad. También hay que contar con los procesos de oposiciones que se celebran, como el de Emulsa y uno a final de año del Sespa. Hay un incremento año a año del número de eventos. Supone un impacto en el PIB de Asturias por encima de 0,5% y muy significativo en el empleo. Estamos en línea con los recintos feriales de Bilbao, Sevilla, Valencia… En esa liga. Esta una actividad económica de primer nivel. Por eso la necesidad de una modernización de la infraestructura y el vial para facilitar el uso del recinto.

Acuerdo para construir el vial de la Feria, que no tendrá glorieta en la carretera de Somió

–¿Mantendrán el planteamiento de evitar aglomeraciones en la Feria Internacional de Muestras de Asturias (FIDMA)?

–Fue una lección que nos enseñó la pandemia. Permitir que las entradas para los días especiales se pudieran usar cualquiera de los 16 días funcionó muy bien y facilitó que desaparecieran las aglomeraciones. Es más cómodo para el visitante y para los dos mil expositores, que para nosotros son la prioridad. Con las aglomeraciones no podían atender como querían todas las personas que accedían. Con esa fórmula se repartieron durante el conjunto de todos los días. Y así continuaremos.

–¿Quedan espacios libres?

–Hemos empezado a finales de febrero la comercialización del recinto con el periodo preferente, es decir, ofrecer primero a los actuales expositores. Esta fase previa va muy bien y se están acercando nuevos expositores. Habrá novedades interesantes para esta edición, aunque todavía es prematuro avanzarlas. A la vez se está trabajando en la actividad institucional, por encima del centenar. Hay mucho trabajo e ilusión para que la FIDMA vuelva a ser el referente económico de Asturias y de España.

–¿Ha tenido impacto en la actividad el doble sentido en Doctor Fleming al peatonalizarse la avenida del Molinón?

–Desde la Cámara ya trasladamos que la peatonalización de la avenida del Molinón no era adecuada ni para la movilidad del recinto ni la de la propia ciudad. Que doctor Fleming tenga doble sentido es el menor de los males, porque sí se precisaba esa salida. Ahora, desde luego que la opción optima hubiera sido la entrada por Fleming y la salida por la avenida del Molinón. No hay que perder de vista que se reciben muchas personas del conjunto de Asturias y muchas zonas de España. Agradecemos eso sí que el aparcamiento de Hermanos Castro haya vuelto a entrar en funcionamiento, porque es fundamental.

–¿Por qué?

–Cuando se diseña un recinto ferial, en lo primero que se piensa es en sus accesos y en los aparcamientos. Estos recintos están pensados para juntar personas y, por tanto, deben tener unos accesos fáciles, cómodos y unos lugares donde estacionar los vehículos. Más allá de que la propia ciudad aumente otras formas de movilidad, como vehículos compartidos, líneas de autobús, bicicletas y patinetes o de forma peatonal. Pero eso no quita que un recinto de ámbito regional y nacional como este necesite esos accesos. Llegado el caso, es una reivindicación a la que no renunciamos, el que se pudiera recuperar ese vial de la avenida del Molinón como parte de esa salida norte de la ciudad y del ordenamiento del tráfico.

–¿Cuál sería la mejor intervención en el Muro?

–El paseo del Muro vertebra la ciudad de este a oeste, es una arteria fundamental y gracias al espacio que tiene cabe todo tipo de movilidades, la de los vehículos a motor en ambas direcciones y otro tipo de movilidad junto al uso de peatones. Lo que precisa es una ordenación respecto a cómo está estructurado, que ahora es un "scalextric" complicado de seguir y de utilizar.

–¿Pero el tráfico soterrado?

–Pensando con ambición lo que tiene que ser la movilidad en Gijón, y que se ha hecho en otras ciudades, es el soterramiento del tráfico. Incluso con entrada en la plaza del Humedal y salida hasta un poco más allá de la avenida del Molinón. Son esas inversiones las que modifican una ciudad y hacen ciudad de futuro. En cualquier caso, lo primero es que el Muro compatibilice todo tipo de movilidad. Hay espacio y es posible, lo que hace falta es ordenar esos espacios porque tal como está es hasta un peligro.

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