Colegios que "educan en la Verdad para ser libres"

"Educar en la Verdad para ser libres" es el lema de los Colegios Juan Pablo II, recientemente llegados a Asturias de la mano de la Fundación Educatio Servanda, una iniciativa de familias cristianas, que integra a laicos y sacerdotes diocesanos dispuestos a trabajar para y por la educación, respondiendo a la situación de "emergencia educativa" declarada por la Iglesia en innumerables ocasiones.

El objetivo central de los Colegios Juan Pablo II es claro: colegios pensados para ayudar a las familias en la hermosa tarea de la educación de sus hijos, desde una perspectiva claramente cristiana para dar sentido transcendente a la vida de sus alumnos. Para ello, es fundamental, además de ofrecer un sólido proyecto de formación en idiomas, humanidades y ciencias, integrar con criterios comunes la acción educativa de la familia, del tiempo libre y de la escuela, que son los tres pilares básicos en que descansa la educación de la persona.

La Fundación Educatio Servanda trabaja actualmente en seis provincias, con 17 centros educativos, de los cuales 11 de ellos constituyen la Red de Colegios Juan Pablo II. Además de la promoción de centros de nueva creación, que inició en 2010, desde 2015 ha incorporado a su red diferentes realidades educativas para reimpulsar y vigorizar sus proyectos educativos.

Es ahora el encargo que acaba de recibir del Obispado de Oviedo con los seis centros de titularidad diocesana, cuatro colegios y dos escuelas infantiles, que este próximo curso se incorporan ya plenamente a la Red de Colegios: Escuela Infantil Juan Pablo II– San Eutiquio (Gijón,) Colegio Juan Pablo II– San Miguel (Gijón), Escuela Infantil Juan Pablo II– Sagrada Familia (Corvera), Colegio Juan Pablo II– San Nicolás (Avilés), Colegio Juan Pablo II– Santo Tomás (Avilés) y, Colegio Juan Pablo II– Sagrada Familia (Oviedo), centro este último de integración preferente con atención a la diversidad.

Dentro de las ventajas que va a reportar a estos seis centros la incorporación a la Red de Colegios, destaca el Oxford Excellence Programme. La Fundación Educatio Servanda es la primera institución en España que posee el prestigioso sello de calidad "Oxford Quality" impartido por la Universidad de Oxford, pudiendo otorgarlo a sus centros, precisamente por sus programas de enseñanza de inglés, contando con materiales de la mayor calidad y todo un programa de mejora que se adapta a las circunstancias actuales de cada centro para llevarlo al máximo nivel.

Actualmente, dos de los colegios de la Red poseen el sello en propiedad, estando varios de ellos en plena progresión hacia el mismo, gracias al Oxford Excellence Programme. En otros ámbitos, los alumnos se pueden beneficiar del programa de actividades de ocio y tiempo libre, como los deportes en equipo, que fomentan la fortaleza, la generosidad, el compañerismo y la autoestima. Todo ello inmerso en el programa de excelencia académica que trabaja la Fundación en sus centros y que ya cuenta con una magnífica reputación: las mejores y más aptas pedagogías para cada asignatura, formación para el profesorado, cuidadosa selección y elaboración de materiales educativos, introducción de las herramientas tecnológicas necesarias, refuerzos educativos y grupos avanzados, etc., todo pensado para dar a cada alumno lo mejor, como se merece.

Educación integral

El proyecto de los Colegios Juan Pablo II de Educación Integral, incluye un plan de formación con maestros y profesores, para contar con el mejor equipo docente, asistidos por sacerdotes Diocesanos. Se promueve una educación integral y trascendente desde una concepción cristiana de lo que significa ser persona, y con una perspectiva claramente práctica, desde un sentido de la realidad, de lo concreto. Las ciencias y las artes son concebidas como medios de transformación del mundo, que ayudan a despertar el amor por el saber. El colegio pretende transmitir valores, pero, sobre todo, ser escuela de virtudes, es decir, el valor encarnado en el alumno. En dicha formación se tiene en cuenta las particularidades de cada alumno para potenciar sus facultades, en cuanto a persona única e irrepetible, verdadero tesoro a los ojos de Dios. Porque, como dijo Juan Pablo II: "educar no es simplemente instruir, es participar y hacer participar en la verdad y en el amor".