Metidos en la harina del nuevo plan de movilidad ciudadana que limita la velocidad de circulación de vehículos entre los veinte y los treinta kilómetros/hora por el centro de Gijón, habría que conocer cuál es la velocidad media que marcan ahora los autobuses municipales, que seguro que tienen el dato. Y es un dato a tener en cuenta por si el transporte público ha de ganar o perder velocidad en la refriega, que diría aquel ciudadano. A saber cuál es la media de la línea entre el Hospital de Cabueñes y El Cerillero o la que une Pumarín y el centro sanitario. Son datos a tener en cuenta y que seguro que manejarán los autores del plan, sin duda con acceso a los que maneja la empresa municipal. Los nuevos planes reservados al transporte municipal sí que van a afectar a un amplio sector de la población gijonesa que usa el bus como eficaz medio de transporte por una ciudad que merece ser recorrida.
La esquina