Washington / Oviedo
El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, aseguró ayer, en una entrevista con el canal estadounidense de televisión CBS, que Francia no renunciará a las armas nucleares hasta que el mundo no sea un lugar seguro.
Sarkozy explicó que su país tiene menos armas convencionales que Rusia y China. «Hemos dejado de hacer pruebas nucleares y hemos anunciado cuántas cabezas nucleares tenemos», argumentó, para añadir que, «si fuera más allá, podría poner en peligro la seguridad» de Francia.
Por otra parte, Ucrania, Canadá y México dieron buenas noticias a su anfitrión al anunciar que se desharán de importantes cantidades de uranio enriquecido.
