El fiscal general de Estados Unidos, Eric Holder, afirmó ante el Senado que la Administración Obama mantiene sus planes de cerrar el penal de Guantánamo "lo más pronto posible", pero no precisó cuándo.

"Sigue siendo la intención de esta Administración cerrar la instalación en Guantánamo... (porque) sirve de herramienta para el reclutamiento de quienes han jurado hacer daño a esta nación", dijo Holder durante una audiencia del Comité Judicial del Senado.

"Cerraremos Guantánamo tan pronto como podamos, lo más temprano que podamos. Ya se ha hecho la labor en torno a las 240 personas que estaban allí cuando asumimos el control de la instalación", agregó Holder.

Holder explicó que no podía precisar una fecha para el cierre de Guantánamo porque se requieren fondos para adecuar el "sitio alternativo" en la instalación Thomson en el estado de Illinois.

"Tenemos que tener una opción y eso requerirá apoyo del Congreso para la solicitud presupuestaria que hemos hecho", señaló.

Holder precisó que las autoridades trasladarían a esa cárcel a los presos que serían enjuiciados en tribunales militares o civiles, o que serían detenidos de forma permanente o temporal mientras se prepara su extradición a otro país.

El funcionario provocó fuertes reacciones a favor y en contra cuando afirmó que el Departamento de Justicia mantiene la opción de enjuiciar en un tribunal federal en Nueva York al terrorista Khalid Sheikh Mohammed por los atentados del 11 de septiembre de 2001 en territorio estadounidense.

Holder dijo que "la Administración se encuentra en el proceso de revisar la decisión sobre dónde se someterá a juicio a Khalid Sheikh Mohammed y sus cómplices".

"Nueva York no se ha retirado de la mesa como opción donde puedan ser enjuiciados, pero tenemos que tomar en cuenta las preocupaciones de las autoridades locales y la comunidad en la ciudad de Nueva York", aseguró sin embargo.

"Creemos que estaremos listos para tomar una determinación en cuestión de semanas", señaló.

Por otra parte, Holder reiteró que el plan de Estados Unidos sigue siendo "capturar o matar" al cabecilla de la red terrorista Al Qaida, Osama bin Laden, para obtener datos de "inteligencia útil sobre la estructura" de la organización.

Sin embargo, repitió lo que dijo en una audiencia el mes pasado ante la Cámara de Representantes en el sentido de que "es muy poco probable que sea capturado vivo".