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Los insectos maravillan en Luarca

"Se sorprenden, y eso indica que respetarán la naturaleza", explica Domingo Fernández tras mostrar su colección a los alumnos del José García Fernández

Los insectos maravillan en LuarcaG. GARCÍA

La lección de biología de ayer fue diferente para los alumnos de primer curso de Secundaria del colegio José García Fernández de Luarca. Los escolares dejaron a un lado los libros para maravillarse ante la colección de coleópteros (escarabajos) y lepidópteros (mariposas) de Domingo Fernández Crespo, "Chomi". "Es una oportunidad increíble", señalan los promotores de la visita, muy satisfechos con el resultado.

El grupo filatélico "Río Negro" de Luarca expone, desde hace unos días, esta colección, que está abierta a la visita de centros escolares. En especial, está dirigida a aquellos que cursan primero de ESO, al incluirse el estudio de estos animales dentro del plan de este curso. En el estreno de las visitas, el insecto palo que Fernández mostró, vivo, a los alumnos, acaparó todas las miradas.

Domingo Fernández se inició en el coleccionismo de este tipo de animales a principios de los setenta, cuando recibió como regalo una mariposa. Desde entonces, no ha parado de sumar elementos a este conjunto lleno de color y singularidad, del que conoce hasta el más mínimo detalle. Además, transmite con pasión ese conocimiento. "La mariposa isabelina se descubrió por primera vez en España, en los montes de Madrid. Lleva ese nombre en honor a Isabel II", cuenta, por ejemplo. También explica que el gusano de seda produce hasta dos kilogramos de seda natural, o que el insecto palo, que cría en terrarios, siente especial predilección por las hojas de zarzas y rosales.

La muestra se compone de unos mil elementos. El coleccionista los ha reunido mediante su cría, a través de la captura en el entorno, o mediante intercambios de miles de kilómetros de distancia. Así, atesora ejemplares llegados de países tan dispares como Perú, Brasil, o Malasia.

La labor de este valdesano es ardua, pues exige tiempo, paciencia, dedicación y mucho cuidado para que los ejemplares conserven su aspecto durante años. "Es algo que conseguimos utilizando conservantes e introduciendo a los ejemplares en cajas herméticas", señala Chomi, que se muestra muy orgulloso de que su colección sea vista con tanto interés por parte de los escolares. "Es una maravilla que se sorprendan tanto con estos animales. Eso indica que se fijarán, y cuidarán y respetarán la naturaleza".

De la misma opinión es Amalia González, profesora de Biología en el José García Fernández. "Estamos acostumbrados a tratar este tema basándonos en fotografías de libros o en imágenes que obtenemos de internet. Pero es complicado que puedan ver ejemplares como estos, muy llamativos, en directo. Nos ayuda mucho a la labor docente", asegura González, que cree que es una buena forma de "dar nociones para cuidar el medio ambiente y esta gran variedad".

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