"Mis veinte años de trabajo en la administración local me han enseñado que, desde un Ayuntamiento, se puede hacer mucho para mejorar la vida de los vecinos y que, para cambiar muchas cosas, solo se necesitan voluntad, ilusión y ganas de hacer", señaló ayer Ana Vigón en su primer discurso como alcaldesa de Tapia. Los socialistas, con el apoyo del único edil de Foro, Guzmán Fernández, hicieron historia al lograr, por primera vez en la democracia, el gobierno municipal de Tapia.

A la mesa de edad, integrada por el edil más antiguo, el socialista Emilio Reiriz, y la segunda concejala más joven, la popular Salomé Sánchez, le tocó leer en voz alta el contenido de los votos ante un abarrotado salón de plenos. La votación se hizo de manera secreta a petición de la bancada popular, así que los concejales escribieron el nombre de su elegido en un papel en blanco. Como estaba previsto, hubo dos candidatos y Vigón logró seis de los apoyos, frente a los cinco que registró el candidato popular, Pedro Fernández. Este último tomó previamente posesión de su acta de concejal, jurando el cargo.

Vigón, que optó por prometer el cargo antes de tomar el bastón de mando de manos de su compañero Emilio Reiriz, se puso ayer a disposición de los vecinos, consciente de que "para devolver la confianza de la ciudadanía en la política es necesario abrir puertas y ventanas, ser transparentes". Por eso, su primer gesto como alcaldesa, minutos después de que finalizara el pleno, fue asomarse al balcón de su nuevo despacho, abierto de par en par. "Quiero que el Ayuntamiento de Tapia se ponga en modo de escucha activa y para eso no hay que encerrarse en los despachos, hay que patear el concejo, escuchar y ser sensibles a cada necesidad y a cada problema", añadió.

La primera mujer investida alcaldesa en Tapia (hubo otras dos anteriores, Covadonga López de los Bueis y María Antonia Fernández, pero ocuparon el cargo en funciones) se definió como una persona "luchadora, con gran capacidad de trabajo y valiente". Confesó la "ilusión" con la que afronta un cargo "de gran responsabilidad política, pero también personal". En este sentido, tuvo unas palabras para su familia, a los que pidió "comprensión" por el tiempo que les robará para cumplir sus sueños.

"A quienes confiáis en mí espero no defraudaros, a los escépticos espero ganaros con el trabajo diario y el acierto en la gestión", precisó.

Vigón, de 50 años, afronta su tercer mandato como concejala y es su segunda vez en el gobierno, ya que entre 2011 y 2013 formó parte del gobierno del regidor de Alternativa por Tapia, Manuel Jesús González "Cuco".

La nueva Alcaldesa se refirió a su acuerdo con Foro Asturias como un pacto "por y para Tapia", y se defendió de las críticas vertidas estos días por los populares (fueron la lista más votada en 2015, aunque empataron a cinco concejales con el PSOE) diciendo que "hoy las mayorías no se ganan, hoy las mayorías se acuerdan". En términos similares se expresó Adrián Barbón, secretario general de la FSA-PSOE (de cuya ejecutiva forma parte Vigón), quien estuvo presente en el pleno junto a otros alcaldes y concejales socialistas de la comarca. Barbón explicó que la política del siglo XXI se basa en el acuerdo y en el diálogo y, en este sentido, defendió la "capacidad de acuerdo y diálogo" que tiene la nueva alcaldesa. Se mostró convencido de que, con su nombramiento, Tapia "abre una puerta a la esperanza y la ilusión".