«Cortinos. Colmenares tradicionales del Occidente de Asturias» es el título de una muestra fotográfica que exhibe una selección de imágenes del millar de estas estructuras catalogadas por el naturalista Ernesto Díaz y el biólogo Javier Naves hace una década en el ala oeste de Asturias. Díaz no duda al decir que son construcciones «únicas en el mundo» y anima a protegerlas más porque «el grado de degradación es muy alto, sobre todo en los últimos treinta o cuarenta años». De hecho, considera que del millar de cortinos (también denominados cortíos en la zona occidental) catalogado en su día, es posible que ni el veinte por ciento se conserven actualmente en buen estado.

Los comisarios de la muestra impartieron ayer una conferencia en el Museo Etnográfico de Grandas «Pepe el Ferreiro» con motivo de la apertura de esta exposición, que se podrá visitar hasta finales de año. La muestra forma parte de un proyecto impulsado por Cultura para preservar este patrimonio ligado a la producción de miel en el Occidente.

Señala Ernesto Díaz que los cortinos, construidos con piedra en seco, fueron creados para proteger las colmenas del clima y también de los osos. Lamenta que su ubicación en zonas aisladas de monte, alejadas de las vías de la comunicación y con una propiedad hoy difusa contribuyan a su desaparición. La exposición quiere reivindicar su valor y evitar que caigan en el olvido. Además, el museo grandalés organizará visitas temáticas para explicar el sistema tradicional de cría de abejas, informa T. C.