La hostelería canguesa proyecta una nueva fiesta relacionada con el vino para marzo

La vendimia, con cuatro días de actividades, volvió a ser "un éxito rotundo" para organizadores y participantes: "Fue incluso mejor que la del año pasado"

Un momento de la pisada tradicional de la uva, el sábado.

Un momento de la pisada tradicional de la uva, el sábado. / D. Álvarez

D. Álvarez

La Junta Local de Hostelería de Cangas del Narcea celebra un año más “el éxito rotundo” de la Fiesta de la Vendimia, una fecha consolidada en el calendario festivo cangués a la que se le quiere dar continuidad con una nueva celebración dedicada al sector para el mes de marzo. La idea es que después de ver pisar las uvas en octubre, la gente vuelva en marzo a Cangas del Narcea para probar el vino.

La nueva cita vinícola se bautizará como la Fiesta del Trasiego del Vino, en referencia al acto de cambiar de recipiente el producto durante su elaboración en bodega. El presidente de los hosteleros, José Manuel García “Manolito”, cuenta que antiguamente “el trasiego del menguante de marzo era el mejor del año” y esa tradición es la que quiere recuperar en una nueva jornada festiva que espera que como la Fiesta de la Vendimia suponga un atractivo para el concejo “en un mes que todavía es invierno y no hay actividad que mueva a la gente a Cangas”, señala.

Por delante quedan unos meses para dar forma a esta idea, de la que por ahora se prefiere no dar detalles. Aparte José Manuel García también avanza que tras el éxito que está teniendo la Fiesta de la Vendimia y con el incremento de producción de vino que habrá el año que viene derivado de la buena cosecha de este año “tendremos que darle una vuelta para ganar más espacio para el vino de Cangas, que sea más protagonista”.

La satisfacción de los organizadores es compartida por los bodegueros que participaron de la fiesta. Beatriz Pérez, de la bodega Vidas, incondicional de la cita, asegura que este año “fue un éxito, incluso mejor que el año pasado”. Valora que la ubicación de las bodegas de la Denominación de Origen (DOP) sea en el patio del Ayuntamiento, un lugar que además de vender les permite transmitir el trabajo que hay detrás de cada botella de vino. “Se vendió muy bien y la gente se mostraba interesada por los vinos, el espacio en el que estamos nos permite dar una buena imagen y contar nuestro producto”, destaca la bodeguera, que espera que en próximas ediciones “se cuide más la temática y la imagen en la calle para que se vea que es una fiesta del vino”.

Adrián Fernández sirviendo vino en su stand.

Adrián Fernández sirviendo vino en su stand. / D. Álvarez

Contento con su primer año sirviendo vino de su bodega se mostró Adrián Fernández, de Señorío de Ibias, que el sábado agotó todo lo que tenía previsto vender durante la fiesta. “Vendimos más de lo que pensamos, hubo mucha gente y muy animada, nos daban la enhorabuena por los vinos y se mostraban sorprendidos con la calidad”, explica el joven bodeguero ibiense, que valora el contacto directo con el cliente que permite el evento.

Carmen Martínez, de bodega Las Danzas, también estuvo presente en el patio del Ayuntamiento con su vino y destacó el “buen ambiente todos los días”, aunque en su caso no notó que se incrementase las ventas respecto a años anteriores aun siendo cuatro días. Para ella, formar parte del festejo “es una obligación que tenemos los bodegueros con el pueblo, nosotros tenemos que estar”, subraya.

Por parte del Ayuntamiento, la edil de Turismo, Tania Rodríguez, destaca que “tanto expositores, comerciantes y hosteleros coinciden que en general fue un éxito de ventas”. Además, subraya que la buena afluencia de público se notó en que todas las actividades complementarias que se ofertaron completaron las plazas disponibles, habiendo en algunas de ellas hasta lista de espera.