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Alberto Menéndez

El fin del "enigma Villa"

El "caso Villa" salió a la luz pública hace poco más de dos años y a lo que parece el enigma de la fortuna oculta de quien durante décadas fuera secretario general del sindicato minero de la UGT y hombre fuerte en la sombra del socialismo asturiano está a punto de desvelarse definitivamente. Y ha sido el propio SOMA quien ha dado los datos definitivos para poner fin a las investigaciones abiertas por la Fiscalía Anticorrupción. El escándalo se destapó tras aprovechar Villa una amnistía fiscal aprobada por el Gobierno del PP para legalizar 1,4 millones de euros.

Todo hace indicar que el fiscal tomó la decisión de preparar ya la querella contra el ex líder sindical minero una vez que recibió, hace unos diez días, una auditoría técnica del Montepío de la Minería (que controla el SOMA-UGT) sobre las obras de construcción del geriátrico de Felechosa, realizadas con cargo a los Fondos Mineros, es decir, con dinero público. La auditoría confirma que en el centro de mayores de Aller no se hizo toda la obra pagada, tal como había concluido la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil tras sus indagaciones.

La Fiscalía Anticorrupción tenía claro desde el principio de la investigación que el dinero de Villa procedía de operaciones poco claras, por lo que era muy difícil, por no decir imposible, que el ex secretario general del SOMA saliera indemne del proceso judicial abierto. Así y todo lo intentó y lo sigue intentado (él o su familia, que a fin de cuentas viene a ser lo mismo).

Más de dos años lleva la justicia (y el Parlamento asturiano también) intentando conocer de primera mano, es decir, por boca de Fernández Villa, qué es lo que pasó, cómo amasó su fortuna. Y una vez tras otra se quedaron los jueces y los políticos con las ganas de sentarse frente al exsindicalista, que ahí sigue, en su domicilio, con periódicas visitas al hospital, aquejado de un síndrome confusional agudo que, según quien sea quien opine, le incapacita o no para prestar declaración en el Juzgado.

Pero va a dar igual. Al final, el proceso judicial va a salir adelante. Y por lo que respecta al prestigio de Fernández Villa hace ya mucho tiempo que está por los suelos.

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