Opinión

Los "Oscar", tan previsibles

Adoramos a Hollywood, como hijos forzosos que somos del Imperio, pero para seguir haciéndolo con dignidad debemos tener presente, al lado de la verdad literaria (cinematográfica) y la calidad de sus productos, el sustento ideológico y oportunista, consciente o inconsciente, de su cine y sus premios, que alcanza el punto de excelencia en los "Oscar". Las estatuillas varias a "Oppenheimer", un buen biopic, no dejan de ser un descargo de conciencia en momentos en que el miedo atómico, como un Drácula que despierta, viene de la mano del resurgir de la amenaza nuclear; de igual modo que "La zona de interés", enésimo recordatorio (tan justificado como todos) del holocausto y otra dramatización más (tan necesaria como las precedentes) de "la banalidad del mal", no deja de jugar de hecho cierta función de contrapeso ante una opinión pública cada día más horrorizada por los desmanes en Gaza.

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