David ORIHUELA

Pagar más de factura de agua que de alquiler de piso no es muy normal, y así lo entienden los vecinos de La Corredoria que viven en pisos en de alquiler protegido, en el que el Principado marca la renta.

El sistema podría parecer positivo ya que los inquilinos pagan una renta que ronda los 350 euros al mes, con comunidad, garaje y trastero. Pero las cosas se complican cuando llegan facturas mensuales de la empresa Servigás, con la que tienen contratada la calefacción, que iguala el precio del alquiler.

Así que los vecinos de los edificios de Arboleya Visión Norte, en La Corredoria, presentaron ayer 266 firmas de protesta en la Consejería de Vivienda, quejándose por lo elevado de las facturas y por la obligación de mantener el contrato de suministro con la empresa catalana Energía Serveis. «Al salir de firmar el contrato de alquiler nos llevaron de inmediato a otra sala para firmar con los catalanes», describe Carlos González, uno de los afectados.

Consideran que si viven en viviendas con algún tipo de protección no es lógico pagar tan alto precio. González acudió ayer a la Consejería con un buen montón de facturas. La que abarca del 15 de diciembre al 15 de enero asciende a 323 euros, «cuando el alquiler del piso, sin garaje ni trastero, es de 260 euros», denuncia. Los afectados se plantaron ante las dependencias de la Administración en Llamaquique con las firmas y las pancartas.