A Roberto Sánchez Ramos, "Rivi" (IU), concejal de Cultura del Ayuntamiento de Oviedo, no le han convencido las explicaciones ofrecidas por el Ministerio de Defensa para ceder a la ciudad los restos del convento y de la capilla románica que se encuentran dentro de la Fábrica de Armas de la Vega. Y es que Defensa, como publicó anteayer LA NUEVA ESPAÑA, alega que la operación no es viable "jurídicamente".

El departamento que lidera María Dolores de Cospedal (PP) dio así carpetazo a la idea del tripartito de desgajar los restos del antiguo convento de la Vega para crear una ruta entre lo que queda del recinto que se fundó en el siglo XII para dar cobijo a Doña Gontrodo y la iglesia prerrománica de Santullano. Para Sánchez Ramos "no es un problema jurídico, sino de voluntad política". Y abundó que "los problemas que puedan existir desde el punto de vista jurídico se solucionan con una voluntad política que hay que demostrar entre ambas partes".

El edil de Cultura no entiende el motivo por el que Defensa no quiere oír de ceder parte del suelo de la Vega, cuando sí ha dado el visto bueno para entregar al Ayuntamiento de Oviedo dos naves en la Fábrica de Armas de Trubia para establecer allí un centro de interpretación de la industria en el concejo. "Si lo pueden hacer en Trubia, cómo no van a poder hacerlo en la Vega. Tiene la misma calificación, el mismo propietario?", cuestionó Sánchez Ramos. Y es que el veterano edil comunista afirma que "la fábrica de la Vega es un patrimonio histórico, cultural que tiene que inexorablemente acabar en manos del pueblo de Oviedo y de su Ayuntamiento".

¿Y cómo hacerlo? En este punto Sánchez Ramos puso sobre la mesa un argumento que ha venido repitiendo, tanto de palabra como por escrito, el exalcalde Antonio Masip (PSOE), cuando negoció la compra de los cuarteles del Milán con el Ejército en su etapa como regidor. "Oviedo tiene una gran experiencia de similares características cuando en los años 80 se pudo reconvertir un cuartel en una facultad y en una zona verde: El Milán", señaló Sánchez Ramos.

Eso sí, el edil tiene asumido que "en esa negociación deben participar otros estamentos como el Principado". Pero Sánchez Ramos, al igual que el resto del tripartito (Somos y PSOE), tienen una línea roja: "Lo que hay que dejar claro a Defensa es que Oviedo no puede permitir especulación alguna con los terrenos de la Vega". Y es que la política de Defensa con terrenos tan jugosos como el de la Vega siempre ha pasado por venderlos. Por eso, Sánchez Ramos asegura que "lo que procede ahora que ya hay ministra, que además es secretaria general del PP y presidenta de Castilla-La Mancha, es que se siente con el Ayuntamiento y con el Principado para comenzar a negociar". Estas conversaciones, siempre según el concejal de Cultura, "se pueden afrontar perfectamente siguiendo una negociación a dos escalas: una global sobre la totalidad de la parcela y una cesión de los restos para integrarlos en el patrimonio cultural de la ciudad".

Sánchez Ramos se mostró convencido de que las conversaciones pueden resultar fructíferas para los intereses municipales dado que afirmó que "conozco el sentimiento de muchos militares de alta graduación que están gestionando este patrimonio. Entienden que ese espacio debe quedarse para el disfrute del municipio de Oviedo".

Para Sánchez Ramos lo prioritario ahora es lograr la cesión de los restos del convento de la Vega, y vincularlos a la Ruta Jacobea. "Es el momento idóneo, el Camino Primitivo se ha convertido en un eje de primer orden en Asturias y a nivel europeo. Cuanto más oferta cultural exista, mucho mejor. No se trata de que lo regale", dijo. Cultura ha solicitado a Defensa visitar los restos del convento con un equipo de técnicos, profesores de Historia del arte y la abadesa de las Pelayas.