Drogas, alcohol y apuestas online. Los casos de drogodependencia entre los jóvenes ovetenses se disparan. En la actualidad, hay en la ciudad 155 casos que se tratan dentro del programa "Reciella" de Proyecto Hombre, frente a los 70 con los que se trabaja en Gijón y los 16 de Mieres. La capital multiplica por dos los casos de Gijón e incluso supera la cifra en 15, casi la totalidad de los que se tratan en Mieres. La cifra de 155 casos se desglosa de la siguiente manera: 62 son chicos y chicas y 93 son familias que han pedido ayuda. Datos que preocupan, y mucho, a los responsables de Proyecto Hombre, que son los encargados de tratar con los jóvenes adictos.
El programa "Reciella", en el que colaboran el Principado y el Ayuntamiento de Oviedo, está dirigido a jóvenes con edades comprendidas entre los 14 y los 20 años que son consumidores de drogas o abusan de las nuevas tecnologías. También se trabaja con las familias o los responsables legales, que demandan información y asesoramiento para poder afrontar el problema que tienen en casa. Las familias están perdidas cuando se tienen que enfrentar a un problema de adicción y necesitan pautas para saber cómo trabajar con los afectados. La solución no es sencilla y requiere de apoyo psicológico, terapias específicas para cada adicción, pautas a aplicar en familia y programas de seguimiento en donde se pueda garantizar que el adicto ha sido capaz de superar su enganche.
Julio Jonte es el presidente de Proyecto Hombre Asturias y desgrana cómo es el perfil de estos chavales, ya que el consumo y las adicciones han cambiado en los últimos años. Ahora los drogodependientes suelen ser chicos politoxicómanos o, lo que es lo mismo, que consumen diferentes sustancias. La mayoría de estos consumos son cocaína, porros de marihuana y hachís y alcohol. Un ejemplo corriente es un chaval que bebe, fuma porros y de vez en cuando consume también cocaína. Además, por si el problema fuese ya poco grave, son precisamente estos jóvenes los que se convierten en personas muy vulnerables a la hora de caer en otro tipo de adicciones como son las apuestas online, que están creciendo de forma exponencial en estas edades. "Todos llevan un móvil en el bolso", apunta Jonte. Y es que, aunque en los últimos tiempos han aumentado de forma llamativa las casas de apuestas en la ciudad, los jóvenes suelen decantarse más por el juego online: póquer, bingo, apuestas deportivas...
"Son juegos muy peligrosos porque la recompensa es inmediata. No tiene nada que ver una persona que apuesta online con alguien que juega a la lotería una vez a la semana. Cada vez tenemos más casos con problemas de este tipo y muchos de ellos acaban en el programa 'Reciella', que en Oviedo se ha visto colapsado", concreta Jonte.
El colectivo S2-Grupo, que reúne a varios expertos en internet, ha elaborado un decálogo para evitar el impacto negativo de la tecnología en los menores. Entre estos consejos, pide a las familias que sepan utilizar la misma tecnología que los hijos, que usen contraseñas seguras y que instalen programas canguro para que no puedan acceder a contenidos para adultos, como las apuestas. "Es difícil controlar a los menores, pero el abuso.
