Plenoil garantiza que la gasolinera que pretende construir en el barrio ovetense de Prado de la Vega, un proyecto que se ha encontrado con la firme oposición de los vecinos que incluso han iniciado una recogida de firmas online, no producirá "ni ruidos, ni malos olores". Esas eran dos de las grandes preocupaciones de los habitantes de este barrio que está creciendo con fuerza a las faldas del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) y que les ha llevado a convocar diversas manifestaciones y protestas, además de realizar alegaciones al proyecto que plantea esta compañía.
Otro de los argumentos usados por la asociación de vecinos de Prado de la Vega es que en la zona ya hay, al menos, otras tres gasolineras con lo que reclaman que el suelo se utilice para otros fines, como espacios verdes, por ejemplo. A Plenoil, sin embargo, no le asusta la competencia y ve el proyecto de Prado de la Vega como estratégico para afianzar su expansión por el norte del país.
Más al detalle, Plenoil es una de las empresas líderes en las conocidas como gasolineras de nueva generación, las automáticas, también llamadas de bajo coste o "low cost". La compañía ha experimentado un enorme crecimiento durante estos últimos años. Abrieron su primera gasolinera allá por 2015. "Queríamos que el servicio de repostaje fuera cómodo, seguro y al mejor precio", asegura Teresa Moreno, directora de comunicación de la compañía. Ahora su objetivo es el de extender la marca a todas las provincias de España. A día de hoy solo les faltan la regiones de la zona oriental del país, Cantabria, País Vasco Aragón o Cataluña, por cubrir. Aunque en muchas de ellas ya tienen previsto nuevos proyectos, todavía en tramitación.
"Para nosotros Asturias es una comunidad estratégica. Tenemos una única gasolinera en Avilés, pero ya manejamos algún proyecto en tramitación en Oviedo y Gijón", destaca Moreno. La intención es que estas estaciones de servicio puedan abrir "próximamente".
En el caso concreto del proyecto para Prado de la Vega la compañía reconoce que "todavía nos faltan algunos trámites, no es que estemos al principio del todo, pero toda esta tramitación es larga y siempre surgen alegaciones y hemos presentado ya en el proyecto de ejecución una modificación previa a la concesión de la licencia".
Moreno asegura también que "las quejas de los vecinos son debidas a la desinformación que tienen sobre la seguridad de nuestras gasolineras". Y añade: "Nosotros estamos abiertos a explicarles el proyecto y cómo se construye para transmitirles tranquilidad y para decirles que, aunque las nuestras son gasolineras automáticas, se rigen por una normativa que las obliga a cumplir con las máximas exigencias de seguridad. Estas no son como las gasolineras que llevan abiertas 20 o 30 años".
Antes de llegar a Oviedo, Plenoil ha realizado un exhaustivo estudio de la zona en la que pretende instalar su negocio. "Analizamos el que haya unos accesos lo más cómodos y amplios posibles para no generar tráficos innecesarios", asegura Moreno, "nuestro objetivo es el de acercar este servicio a la población para evitar que haya desplazamientos inútiles y que se evite generar un gasto extra de combustible y así reducir la emisión de gases contaminantes". Esa es una de las razones por las que la compañía ha elegido uno de los barrios de mayor crecimiento demográfico de la capital asturiana para implantarse.
De hecho, antes de decantarse por Prado de la Vega habían analizado otras posibles ubicaciones. El servicio que ofrecerá Plenoil en Oviedo será lo más simple posible. "La manera de poder tener estos precios tan bajos es reducir los costes, por eso a la hora de construir una gasolinera ocupamos solo el espacio necesario, no tenemos una tienda grande. Solo tenemos surtidores de diésel y gasolina, con una caseta donde hacemos los cobros y donde tenemos una máquina de vending. Todo muy sencillito", asegura.
La directiva agrega también que "la mayoría de nuestras gasolineras se instalan en los centros urbanos y solo recibimos agradecimientos por parte de los vecinos, no se generan ni ruidos y ni olores, y como se analizan muy bien los lugares en los que instalarnos conseguimos evitar muchos impactos negativos".
