El dinero de la UE, garantizado tras poner en marcha la glorieta de Santullano para la entrada a Oviedo, dice Cuesta

En la lucha contra el reloj en la que se ha convertido la tramitación administrativa y la ejecución de los trabajos de reforma de la entrada del tramo urbano de la autopista "Y" en Oviedo, el equipo de Infraestructuras acaba de superar otra etapa con la que, afirma Nacho Cuesta, concejal responsable del área, las ayudas de la UE están garantizadas. Lo dicen después de haber puesto en marcha la licitación del último proyecto pendiente, la ejecución de la nueva glorieta de Santullano.

Los fondos Edusi que financian parte de la operación están condicionados por un calendario que exige contar con las certificaciones de obra aprobadas antes de que finalice el año. Ahora mismo, con la presentación de la memoria justificativa de esta última parte de los trabajos, que incluye la demolición del viaducto de Ángel Cañedo, solo queda que el documento pase por la Junta de Gobierno para que salga a licitación. A partir de ese momento, la adjudicataria contará con un plazo de seis meses para finalizar la obra.

Con ese planteamiento, según los técnicos de Infraestructuras "el ritmo que se ha alcanzado con los proyectos para la remodelación de la entrada a la ciudad garantiza el cobro de los fondos europeos para cofinanciar estas obras, tal y como estaba previsto", afirma el concejal Nacho Cuesta.

La ejecución de la glorieta de Santullano es la última pieza de una serie de actuaciones que ya están en marcha en diverso grado. La glorieta de la Cruz Roja y su conversión en una nueva plaza-mirador peatonal y de forma ovalada ya está en obras; los trabajos del parque lineal de la margen derecha de la "Y" que finalizan con la ejecución de una pasarela peatonal para cruzar la carrera, el llamado Tobogán de Manterola, ya están adjudicados y a punto de empezar. En parecida situación se encuentra la rehabilitación del Palacio de los Deportes y su entorno.

La idea prometida por el alcalde Canteli de que el arranque del año traería una ciudad "patas arriba" por las obras empieza a cobrar forma, poco a poco, en la zona superior del ámbito. Ya se ha empezado a trabajar en las obras del colector asociadas al proyecto, pero mañana mismo, indican fuentes municipales, se iniciarán los trabajos en el entorno de la calle Marcelino Fernández y margen derecha del Bulevar de Santullano, en la salida sentido Gijón de la autopista, justo al lado del muro exterior de la fábrica de La Vega.

Cuando las labores relativas al proyecto del colector, en la calle Francisco Rodríguez García, estén más avanzadas, explican fuentes del servicio, empezarán las obras en la nueva plaza. Se busca reducir al máximo la afección al tráfico en la zona y se calcula que esta parte del proyecto empezará a ejecutarse dentro de un mes, a finales de febrero.

A todo este conjunto de planes de reordenación se suma ahora el de la nueva glorieta de Santullano, cuya memoria justificativa plantea un proyecto de reordenación del tráfico muy peatonal. Junto al Palacio de los Deportes se ejecutaría una nueva gran alameda para recorrer a pie en el espacio va de Ventanielles a Teatinos, donde todavía está el puente de Ángel Cañedo, cuya demolición está prevista.

Todos los recorridos peatonales y de carriles bici diseñados en esta última pieza del nuevo bulevar encajarán, a un lado y otro, con los proyectos ya en marcha, el de la Cruz Roja y el del parque lineal. Además, la nueva glorieta de Santullano permitirá una nueva conexión entre dos ámbitos. Con la situación actual, al tráfico procedente de la autopista se le impedía el giro a la izquierda, lo que había convertido a Ángel Cañedo, explica el proyecto, en un elemento de separación del centro urbano con los barrios. En la actualidad, las formas de acceder a Ventanielles desde la "Y" obligan a desviarse por la Tenderina, bien desde la avenida de Atenas, bien desde la ronda interior, para volver a atravesar la autopista y llegar al barrio, o desviándose por el HUCA y volviendo a girar hacia el Sur. Ahora, la nueva rotonda establecerá nuevas conexiones directas a ambos lados de la autopista, quedando encajada la nueva infraestructura entre el viaducto de Ángel Cañedo (que desaparecerá), por el Este, y la prolongación de la calle Río Dobra.

El proyecto no se limita solo a la glorieta como nueva distribuidora del tráfico. También se generará un espacio verde y que facilite, detalla la memoria, "la fluidez del tránsito peatonal y otros tipos de movilidad sostenible en los diferentes sentidos, y que permita también la movilidad ciclista continuando la de los otros tramos del bulevar".

La nueva glorieta de Santullano, concluye el documento justificativo del proyecto, "constituye una pieza muy importante por su emplazamiento estratégico como punto, no solo de nexo con la trama del casco y barrios del entorno, sino también como punto origen y de partida para las futuras actuaciones del Bulevar de Santullano y de la Fábrica de la Vega como lugar neurálgico de centralidad y accesibilidad, cohesionando los barrios de la ciudad, calmando el tráfico rodado y potenciando nuevos modos de movilidad; a la vez que punto de potencial de desarrollo económico y cohesión social".

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