Colectivos vecinales de Oviedo denuncian ante el Sespa la falta de médicos en el centro de salud de El Cristo

Más médicos, mejor asistencia y, si hace falta espacio, una ampliación del mismo. Son las principales reclamaciones de los colectivos vecinales de Oviedo que denuncian ante la Consejería de Salud el mal funcionamiento del centro de salud de El Cristo. Este miércoles, presentaron en la sede del Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) unas 2.400 firmas para reclamar soluciones. El problema no afecta solo a los vecinos de la zona. También a los de poblaciones del área rural al oeste de la ciudad como Siones, Las Caldas, Puerto y Caces. Todos estos pueblos depende de este centro de salud. "No estamos pidiendo nada raro. Estamos luchando por algo tan importante como la salud", espeta Marcelino Pérez, uno de los miembros de la Asociación de Vecinos de El Cristo.

Los colectivos vecinales del barrio y de la zona rural coinciden en que desde la pandemia, la situación del equipamiento no deja de empeorar. "Antes del covid no había tantos problemas. Siempre que había una baja mandaban un médico sustituto, pero ahora los servicios no paran de menguar", explican los vecinos. Conchi Álvarez, otra de las personas que compone la asociación de El Cristo, dice que "se está aprovechando la pandemia para recortar servicios". Desde el centro de salud, señalan que los problemas se deben a que hay una plaza por cubrir, algo que no convence a los vecinos. "Si no hay médicos, habrá que buscarlos", recalcan.

La atención telefónica es otro de los deberes del centro, algo que afecta especialmente a los usuarios de la zona rural, que están a una mayor distancia. "Llamas por teléfono y nadie lo coge. Y si quieres que lo cojan tienes que estar todo el día al teléfono", destacan Cristina Iglesias y Rosana Montes, de la Asociación de Vecinos de Las Caldas. En su ambulatorio, la médica se puso de baja y aún no ha sido sustituida de manera fija. Iglesias y Montes aluden a un caso en particular que demuestra "el desconcierto" del ambulatorio. "Una vecina fue a recoger la medicación para su marido, con un trasplante de riñón. Y no sabían ni qué medicación tomaba", señalan. 

Otro problema a abordar es que el ambulatorio coge citas telefónicas y a través de la aplicación del Sespa, algo que provoca que el médico sustituto de Las Caldas, que viene algunos días desde Trubia, tenga dos pacientes a la misma hora. "Está saturado", valoran. A este centro acuden también los vecinos de Caces y Siones, que se encuentran con el mismo problema. "No puedes tener a la zona rural sin un médico fijo. Hay gente muy mayor y a veces el doctor tiene que salir a atender a alguien", añade Juana Delgado, la representante de los vecinos de Siones.

Algunos de los pacientes del área rural deciden ir directamente al centro de salud de El Cristo, donde tampoco solucionan sus problemas. "Me dieron una cita para dos semanas después y me la cambiaron a más adelante y con una médica que no es la mía. Y encima no es ni presencial", confirma una vecina de Las Caldas. En pueblos como Caces, representados por su futuro alcalde, Eleuterio Díaz, destacan el problema del transporte, difícil para personas mayores y con movilidad reducida. Por otro lado, en Trubia, denuncian que haya un único pediatra para atender a 130 niños.

Representantes del PP, con la diputada Pilar Fernández Pardo y el concejal Daniel Tarrio, volvieron a acompañar a los colectivos vecinales, esta vez para la entrega de firmas en el Sespa. "Esperamos que la consejera solvente el problema con los centros de salud periféricos, que les abocan a venir al HUCA", afirmó Fernández Pardo. También contestó al presidente Adrián Barbón, que señaló en el pleno de este miércoles que el PP es el único que ha pretendido cerrar centros sanitarios. "Los responsables del abandono de estos centros han sido los gobiernos socialistas que han gobernado la región", respondió.