Como si fuera un gesto irónico del destino, el Oviedo ve cómo la "cláusula del miedo" le devuelve la jugada. En los dos últimos años, Néstor Susaeta no pudo jugar ante los azules al incluir su contrato una condición por la que el Albacete debía abonar un pago importante si quería contar con el vasco en esos partidos. El extremo tuvo que ver los toros desde la barrera. Ahora, la cesión de Ortuño en el camino contrario cambia los papeles y el murciano se quedará en Oviedo para el duelo que mañana azules y manchegos disputarán en el Carlos Belmonte. Y a Rozada le toca darle una vuelta de tuerca para que los planes no se trunquen.
Asegura el entrenador sentirse tranquilo. Argumenta que, desde su llegada, el Oviedo es un equipo que se incorpora de forma alegre al ataque y que llega con gente. No le falta razón, como se pudo comprobar en el duelo ante el Numancia. Pero la influencia de Ortuño en el área está fuera de toda duda.
El ariete es con 7 tantos la referencia azul ante el gol. En un conjunto que acumula 11 aciertos, él ha hecho el 63,6% de las dianas. Su olfato le mantiene como máximo goleador de la categoría, igualado con Suárez (Zaragoza) y Stuani (Girona). Los goles premian su insistencia. Ha disparado contra la meta contraria en 15 ocasiones, sobre un total de intentos azules de 63, lo que supone el 41,6% del total de tiros a puerta. Rozada ha valorado durante toda la semana cómo llenar su vacío.
No lo tendrá sencillo si se analizan los números ofensivos. Solo hay dos futbolistas del Oviedo más que hayan experimentado la sensación del gol. Uno es Bárcenas, autor de los dos últimos tantos. El panameño se pierde el choque por estar concentrado con Panamá. El otro es Obeng, una de las novedades (junto a Viti) en la expedición para Albacete.
Obeng, con ficha del filial, anotó su gol con el primer equipo en su estreno en La Coruña con un espléndido cabezazo. Fue en su único intento ante el arco rival. Hasta ahora ha disfrutado de 51 minutos, en tres encuentros. Rozada aún no le ha empleado sobre el terreno de juego.
Pero la lógica señala que el elegido para suplir a Ortuño será Joselu. El delantero no está viviendo un inicio sencillo de campaña. Una lesión truncó su aportación en las primeras semanas. Una vez recuperado, se ha encontrado con la irrupción de Ortuño y el mal momento del equipo. A pesar de todo, Rozada le ha dado cierto protagonismo, aunque nunca en el puesto de nueve. Joselu lleva 347 minutos en liza, con 2 remates a puerta (los dos a los postes) y 4 fuera.
Otro rol diferente es el que juega Ibrahima, con un rol intrascendente hasta ahora. El senegalés ha participado en 3 partidos, de forma testimonial: 12 minutos. No le ha dado tiempo ha intentarlo sobre la portería del contrario.
