Momentos de mucha tensión en los exteriores del Anxo Carro tras la derrota del Oviedo (1-0). Decenas de seguidores azules esperaron en las afueras del estadio a la salida de los jugadores azules, señalados por parte de la afición como máximos responsables de la situación del equipo, en puestos de descenso a Segunda B cuando faltan trece partidos.

Varios aficionados increparon a los jugadores por su actitud. "Peseteros, echarle más ganas. Hay que correr, que nos vais a llevar a Segunda B", fueron las consignas más repetidas entre los hinchas, muy cabreados. Hubo jugadores, como Luismi, que se llevaron aplausos, pero casi todos se subieron al autobús en medio del cabreo general. Saúl Berjón, Tejera y Ortuño se llevaron la peor parte. "Menos fotos en Instagram y más ganar partidos", se escuchaba tras la valla, en una situación desagradable controlada por la Policía Nacional, pero que no pasó a mayores.

Christian Fernández se paró a dar explicaciones requerido por Jaime Campillo, vicepresidente de la Asociación de Peñas Azules (APARO). "Hay que luchar, que nos vamos a Segunda B", le advirtió Campillo, "eres el capitán, tienes que ponerlos firmes". El cántabro aguantó como pudo el chaparrón. También se escucharon murmullos cuando Dani Bautista, delegado, se subió al autobús. Por la zona habilitada también desfilaron Cuco Ziganda, entrenador, y Francesc Arnau, director deportivo.