Santi Cazorla, contrato vitalicio: esta es el plan del Oviedo con su estrella

"La idea es que se quede siempre en el Oviedo", señala Martín Peláez

Cazorla y Peláez.

Cazorla y Peláez. / Irma Collín

N. A.

Martín Peláez es una de las personas más felices con el fichaje de Santi Cazorla. Porque él fue uno de los principales impulsores. Fue el que tendió los puentes hace meses y el que mantuvo la relación todo este tiempo, hasta que el canterano al fin se decidió a dar el gran paso y volver al equipo de su tierra, el club que le formó y le vio crecer. Por eso, la satisfacción del presidente del Oviedo es máxima y lo expresó con una sentencia durante la presentación del de Llanera: «Nunca pensé que como presidente de este club estaría aquí presentando a un futbolista de la talla de Santi Cazorla». Para Peláez, el fichaje es una cuestión especial de orgullo.

También la configuración final de la plantilla, en un verano movido encabezado por Pachuca en los despachos. Cazorla es el noveno fichaje confirmado, y se sumará en las próximas horas Santiago Colombatto, en una operación avanzada el pasado lunes por LA NUEVA ESPAÑA. «Es un jugador del grupo, estamos a falta de detalles para cerrarlo, pero prácticamente está hecho. Viene a redondear la plantilla», expuso Peláez, que abre la puerta ahora a posibles salidas: «La plantilla no está cerrada al cien por ciento, porque estamos mirando salidas, pero prácticamente está cerrada. Estamos muy contentos con la plantilla, ahora hay que hacer un buen equipo. No lo hemos logrado aún, esto lleva su tiempo, pero ojalá lo logremos en la mayor brevedad. Que demuestren que pueden jugar con orgullo, valor y garra».

Y si Peláez está satisfecho, también Martínez sigue el mismo camino desde México. «Jesús está feliz, Santi ya ha hablado con él. Me decía que es increíble que todo el mundo le había hablado maravillas de Cazorla, a nivel humano eso dice mucho de él. Jesús quiere venir cuanto antes y darle un abrazo a Santi. Firmó por un año, pero la idea es que se quede siempre, como futbolista, embajador, como él quiera. Esta es su casa», cerró el presidente.

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