Crónica desde México: Pachuca se viste de gala para sus «Oscar» del fútbol

La ciudad mexicana recibe a Totti, Puyol y Márquez en una cita que Jesús Martínez cuida con esmero y en la que estará presente por primera vez el Oviedo

Maritza Martínez, con una camiseta del Oviedo en el museo de Pachuca

Maritza Martínez, con una camiseta del Oviedo en el museo de Pachuca

Nacho Azparren

Nacho Azparren

El fútbol entró en México por Pachuca. Tuvieron culpa los ingleses, cómo no, atraídos a las tierras de Hidalgo, el estado mexicano, por el oro y, sobre todo, la abundante plata que escondía sus tierras. Allí se plantaron los británicos para modernizar las minas y, de paso, introducir el fútbol, el golf y el tenis en tierras de Hidalgo. Así lo cuentan, orgullosos, los habitantes de Pachuca. «¡México nos debe el fútbol!», resaltan. Ahora, en esta semana tan especial, el fútbol vuelve a situar a Pachuca como centro de referencia de cara a la celebración de la gala de investidura del Salón de la Fama del Fútbol Internacional que se festeja en la tarde de mañana (de madrugada en España) y que condecorará en persona a exfutbolistas de la talla de Carles Puyol, Francesco Totti, Rivaldo o Rafa Márquez.

Genaro, el conductor del vehículo en el que viaja LA NUEVA ESPAÑA, único medio asturiano testigo de un acto de repercusión global en el fútbol, indica satisfecho cada cartel que en el camino de Ciudad de México a Pachuca, algo más de hora y media si, como es el caso, no hay tráfico, adorna la carretera. Tiene algo la celebración del evento, al menos en los días previos, que recuerda a los «Premios Princesa» para Asturias. Hay carteles, hay un numeroso grupo de trabajadores que desde varios días antes se afanan porque esté todo inmaculado y hay un orgullo generalizado en la ciudad de Pachuca. Todos esperan la llegada de los condecorados.

El Oviedo también está presente en Pachuca. No solo por la amplia delegación, trabajadores y patrocinadores que disfruta en las horas previas, también hay referencias en el museo físico del Salón de la Fama, un balón gigante, de más de 38 metros de altura, 30 metros de diámetro, 120 escalones y capacidad para 326 visitantes, que te muestra en su interior la historia y evolución del fútbol a través de divertidos juegos interactivos, una amplia base de datos y ejemplares de camisetas y otros objetos únicos en el mundo.

Ahí también hay algunas referencias azules. «Esta es la del Real Oviedo», muestra con una sonrisa Maritza Martínez, de prácticas en el museo, la camiseta azul, entre decenas de otras zamarras que descansan en tubos de cristal. El otro guiño al club carbayón se centra en la figura de Isidro Lángara, goleador implacable en el Oviedo como después hizo también en México y Argentina. De Lángara hay fotos, un par de fichas federativas y hasta una camiseta de cuando jugaba en la Liga azteca. Tras mostrar a LA NUEVA ESPAÑA cada rincón del museo, Maritza se reúne con el resto de colaboradores junto a Vero, la encargada de que todo funcione perfectamente, y que despide a los chicos, como todos los días, con un aplauso que va de menos a más. A ellos, los chavales, que colaboran en el museo, también se les nota nerviosos con la cita.

Desde su despacho, pendiente de cada detalle, aunque de momento en un segundo plano, Jesús Martínez supervisa todo y está encima de las pruebas previas, los invitados y todo lo que se tercie. Para él, contar con la presencia de la delegación del Real Oviedo supone hacer la cita aún más especial.

La actual será la undécima investidura, la que sucede a la votación hecha en Oviedo hace algunos meses y que sirvió para nombrar como miembros del Salón a 18 nuevos integrantes: Carlo Ancelotti, Xavi Hernández, Samuel Eto’o, Francesco Totti, Carles Puyol, Kaká y Rivaldo (fútbol internacional); Uve Seeler (decano internacional); Zague y Chololo Díaz (decanos nacionales mexicanos), Pretinha (fútbol femenino internacional), Andrea Rodebaugh (fútbol femenino mexicano); y Rafa Márquez, Cuauhtémoc Blanco, Fernando Quirarte, Ricardo La Volpe, Óscar Pérez y Emilio Azkárraga (fútbol mexicano).

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