Gerona, Marta PALLARÈS

Cuando una banda ha vendido más de 145 millones de discos y tiene en su haber más premios «Grammy» que ninguna otra (exactamente 22), casi todas las cifras quedan pequeñas. Pero solamente «casi», porque el concierto del Camp Nou, que inicia hoy la gira internacional de los irlandeses «U2», se postula como el mayor espectáculo nunca visto en un escenario.

Un número orbita por encima de todos los demás: 360. Éstos son los grados de torsión a los que se somete la gigantesca estructura que se está montando y probando en Barcelona desde hace un mes, y que dan nombre a la gira.

Este baile de números es tan espectacular como promete serlo la visión del escenario para los 90.000 afortunados que hoy asistirán al estreno en directo de «No line on the horizon». Bono, The Edge, Larry Mullen Jr. y Adam Clayton llevan tras de sí 300 toneladas de material, y un equipo tan extenso que el director de producción de la gira, Jake Perry, afirma que no sabe «con exactitud» cuántas personas trabajan en ella.

El arquitecto del escenario, Mark Fischer, explicó que tanto su estructura como las pantallas gigantes tienen un movimiento de 360 grados. Se dispone de diferentes escenarios «moviéndose» de una ciudad a otra, pero solamente hay un equipo de luces y pantallas que se montan 24 horas antes de cada concierto. No obstante, en Barcelona van a quedarse un poco más; y es que el jueves habrá una nueva oportunidad para ver a los de Bono en el Camp Nou, y todavía quedan entradas. Según Fischer, la rotación permite «mayor capacidad de público» y, por lo tanto, más variedad de precios. El grupo ha intentado durante mucho tiempo que no hubiera «malos asientos» y ahora, «aunque ha sido muy caro, funciona».

¿Forma contra contenido? Para la presentación en sociedad del nuevo disco de «U2», los irlandeses afirman que se ha trabajado mucho el material nuevo, pero también habrá tiempo para ofrecer sus grandes éxitos. Serán dos horas de rock para repasar tres décadas de rock, desde «October» a los trabajos más recientes, pasando por los momentos cumbre.