Oviedo, E. F.-P.

El plan de excelencia presentado recientemente por el rector Vicente Gotor, que incluye la reordenación de los campus asturianos, significa, en opinión del Consejero de Educación y Ciencia, que «por primera vez en la historia de Asturias la Universidad de Oviedo toma el liderazgo de lo que puede llegar a ser una transformación económica trascendental para la región».

Oviedo competirá con 50 universidades españolas, entre las que serán seleccionadas 15, que tendrán financiación extraordinaria de la Unión Europea, y otras 15 más, con un sello de calidad que, según el Consejero, «abrirá muchas puertas»: «Lucharemos por que la Universidad de Oviedo esté entre las 15 primeras, pero si no fuera así el sello de calidad facilitará mucho las cosas para acceder a otros medios de financiación».

«O te metes aquí o desapareces», asevera el Consejero al hablar de la competición abierta entre las universidades europeas: «Es importante que la Universidad tome el liderazgo en la transmisión de conocimiento y en la transferencia de ese conocimiento a la empresa».

Iglesias Riopedre respalda plenamente la apuesta de la Universidad de Oviedo por la biomedicina y las energías renovables. «Entran de lleno en los planes del Gobierno regional», manifiesta.

Con la LOE (Ley Orgánica de Educación) ya implantada plenamente, el Consejero echa la vista atrás y reconoce que la transición al nuevo sistema tuvo en su día «una oposición brutal». «La reforma se implantó con lo que teníamos y, como no había sitio en los institutos, los niños se quedaron en los colegios», explica. Hace recuento de las obras que hubo de acometer en Oviedo -«ampliamos el Instituto Alfonso II, el Aramo, el de Pando, La Ería, el Leopoldo Alas Clarín, Ventanielles...»- y habla de «la batalla frontal que tuvimos con el traslado de los niños de Jarrio a Navia».

El Consejero describe cómo resolvió incidentes como ese, que ya son historia de la educación asturiana: «Empezamos a detectar los miedos de los padres y tomamos medidas para solucionarlos. Los padres nos pedían que los niños no salieran del centro en los recreos, pues no salían; nos pedían más disciplina y más rigor con los pequeños, pues la había. Ahora diariamente se avisa a los padres de cada niño que falta a clase, hay un control y una disciplina que antes no existían. Todos aquellos eran problemas reales, no imaginaciones, y los atendimos».

Para el futuro José Luis Iglesias Riopedre desea un pacto por la educación: «Es un clamor popular que los grandes partidos tienen que ponerse de acuerdo. En temas de Estado hay que buscar consenso. En España los partidos sólo quieren hacerse con el poder, pero hay que alcanzarlo para responder a las necesidades de los ciudadanos».