Copiar-pegar-copiar-pegar es una operación que al cabo del día realizamos en multitud de ocasiones. El portapapeles está ahí pero, ¿qué pasa cuando queremos pegar algo que copiamos hace "dos veces"? El portapapeles sólo guarda lo último que hemos copiado pero en principio no almacena un historial.

Generalmente lo tenemos que volver a copiar-pegar con la consiguiente pérdida de tiempo y esfuerzo. No es eficiente. Pero hay varias alternativas para conseguir en Mac un mega-portapapeles. Esas aplicaciones actúan como un "buffer" que guarda lo copiado y que te facilita el flujo de trabajo y tus operaciones diarias. Voy a entresacar cinco de las más representativas.

Siempre que reseño estas "pequeñas" utilidades me gusta recordarme y decirlo en alto que la Productividad y la eficacia están en los hábitos y en el conocimiento sólido de tus principales aplicaciones, sí, pero también en estas sencillas herramientas que te facilitan —y mucho— tareas rutinarias y repetitivas. Siempre que las necesites de verdad. Leer más en el blog.