Comprender la política internacional, haciendo partícipes a los universitarios asturianos en primera persona de los procesos de toma de decisiones que normalmente se presentan lejanos, opacos y en ocasiones incomprensibles. Éstos son, en suma, los objetivos del Modelo Naciones Unidas que, por quinto año consecutivo, se reproducirá en Oviedo, desde hoy y hasta el próximo viernes. El objetivo es que los estudiantes puedan vivir como auténticos delegados del más importante e influyente de los organismos internacionales.
Planteado como foro para compartir conocimiento, experiencias y convicciones, cada uno de los participantes representará a uno de los 32 estados miembros de la ONU con la responsabilidad de tomar parte activa en los análisis que realizarán sobre asuntos de actualidad. "Todas las sesiones tienen la misma importancia", explica Daniel Ares, portavoz de la asociación Ovimun, organizadora del V Modelo de Naciones Unidas de la Universidad de Oviedo. Entre los temas de esta edición se encuentran derechos humanos y refugiados, la posible creación de una fuerza permanente de intervención de las Naciones Unidas, el desarme planteado desde un enfoque de género, el conflicto en el mar de la China meridional o la deuda externa de los estados. "Éste es un foro para crecer y vivir una experiencia que marcará un antes y un después en nuestra forma de observar los problemas de la humanidad", plantean los organizadores.
La presencia de alumnos de "casi todas las titulaciones" se presenta como una oportunidad para el debate. "Lo que se pretende es que entre todos lleguemos a una solución para los temas que se plantean", continúa Ares. Cada participante, como representante de un Estado miembro de la ONU, se enfrentará también a la postura de grupos de presión que tratarán de influir en la decisión final de la asamblea. "El último día se elaborará una resolución final al modo de Naciones Unidas", mencionó el portavoz de Ovimun. "Para los alumnos es también una oportunidad para aprender a hablar en público y empatizar con otras personas", agregó el joven miembro de la organización.
De las primeras nociones sobre cómo negociar y plantear acuerdos se encargarán autoridades del ámbito académico y también de organizaciones no gubernamentales. Las sedes de las asambleas y comités se distribuirán entre la Junta General del Principado y el edificio histórico de la Universidad.
"El aprendizaje reside en que muchos tendrán que defender posiciones con las que no están de acuerdo, pero a veces es lo que más satisfacción produce", remarcó Ares sobre la experiencia de intercambiar diferentes pareceres en busca de un acuerdo final, mejorando así habilidades como la oratoria y la capacidad de negociación.
Las intervenciones de los delegados estudiantiles se combinarán con charlas de expertos. Uno de los invitados de esta edición es el exministro de Asuntos Exteriores Miguel Ángel Moratinos, que tomará parte en la sesión del miércoles.
A los participantes se les exige también un código de conducta. Habrán de referirse al resto de delegados en forma impersonal. En la indumentaria se recomienda traje y corbata en el caso de los delegados, y vestido corto o traje de chaqueta -falda o pantalón- para las delegadas. Tampoco se puede comer o beber durante las sesiones. Y se exige máxima puntualidad. Se espera de cada delegado "un trabajo excepcional". Para los mejores, como en el ámbito de Naciones Unidas, existen premios y menciones.
