Douglas es un tipo alegre, de natural optimista, al que ni siquiera las malas experiencias recientes le han borrado la sonrisa. Desde esa mirada en positivo, el lateral brasileño lanza un mensaje de esperanza, sin esconder la mala trayectoria rojiblanca. "Estamos en una situación en la que no hay nada mejor que tener un buen partido el domingo, porque la solución está en el campo", sostiene el futbolista cedido por el Barcelona. Douglas incluye entre sus buenos propósitos para el año nuevo el de empezar con buen pie en casa: "Es el primer partido del año en El Molinón y es importantísimo para nosotros, por jugar en casa y para salir de esta situación".

Cuando se le pide que diagnostique el estado de ánimo en que se encuentra el Sporting, sorprende al asegurar que "no lo veo mal". El brasileño argumenta su respuesta asegurando que "veo un grupo que, por más dificultades que tenga en el campo, está con ganas y que trabaja". El defensa derecho insiste en que "el Sporting es un equipo que corre muchísimo, que trabaja, que siempre está encima del rival, pero las cosas no salen bien". La dinámica en la que están inmersos los rojiblancos no ayuda y el propio Douglas apunta que "falta un poquito de tranquilidad, de juego dentro del campo".

Por todo ello, no vale otro resultado que la victoria ante el Eibar, en un partido que "tenemos que ganar porque necesitamos sumar los tres puntos lo más rápido posible". La plantilla se conjura para "ir a muerte porque es un partido fundamental para nosotros". Por si alguien necesita datos, Douglas aviesa de que "el resto de equipos ya están con veintipico puntos y nosotros estamos ahí abajo".

Del Eibar valora que "es un equipo que viene bien, que está arriba con 21 puntos, y ya tiene casi el doble que nosotros". El brasileño se suma a la receta dada por algunos de sus compañeros que aboga por "mirar lo nuestro, hacer lo mejor para que nuestro equipo alcance su objetivo y olvidarnos de lo demás". Y concluye que "a partir del momento en que hagamos lo nuestro, todo irá bien".