Con más o menos lucidez en su juego, el Sporting se ha mantenido de forma estable en la zona alta de la clasificación durante las diez jornadas que se han disputado ya. Salvo un par de borrones que embadurnaron su trayectoria en Soria y Pamplona, el Sporting ha mantenido un rumbo estable y un ritmo alto de puntuación. Uno de los secretos es que el equipo tiene un esqueleto bien definido, por más que Paco Herrera insista en que no hay titulares ni suplentes. La realidad es tozuda y, salvo en un par de posiciones, cualquier aficionado rojiblanco puede recitar de memoria el equipo de gala del Sporting.

Más de la mitad del once titular rojiblanco ha jugado siempre que ha estado disponible. Tanto es así que hay cuatro futbolistas que han sido titulares en los diez partidos de liga que ha disputado en el Sporting. Sergio, Federico Barba, Carmona y Rubén García han estado en todas las fotos de alineación previas al inicio del partido. El esqueleto irrenunciable, lo completan Mariño y Roberto Canella, que han sido alineados como titulares en los nueve partidos en los que han estado disponibles para jugar. El portero gallego se perdió por lesión el encuentro de Soria y Canella causó baja por problemas físicos en el último encuentro ante el Huesca.

A la nómina de intocables hay que añadir a Álex Pérez. Al menos, a la espera de la puesta en escena de Xandao. El central madrileño es una apuesta personal de Paco Herrera, que se lo ha traído del Valladolid. Quintero comenzó el curso como titular, pero ha cedido la plaza a Álex Pérez en cuanto éste estuvo en condiciones de jugar. El madrileño ha sido titular en siete ocasiones y forma una pareja consolidada junto a Barba. No obstante, la idea que se maneja en el club es que, cuando coja la forma, Xandao sea el acompañante principal del italiano.

Uno de los habituales es Stefan Scepovic, titular en ocho partidos. Sin embargo, Herrera le ha dado un par de toques al delantero serbio que se quedó en el banquillo ante Numancia y Huesca por decisión técnica. En Soria, el delantero fue Santos, mientras que Borja Viguera cargó por la izquierda. El pasado viernes, el elegido fue Carlos Castro. También Santos es frecuente en las alineaciones de Paco Herrera, aunque ha visto el inicio de varios partidos desde el banquillo.

Las dos posiciones más abiertas en el Sporting son el lateral derecho y el acompañante de Sergio en el centro del campo. En la primera, parecía cobrar ventaja Calavera, pero en León Paco Herrera rescató del olvido a Alberto Lora, que tuvo la mala fortuna de lesionarse a los pocos minutos. En realidad, los dos laterales se han repartido las titularidades a partes iguales.

La otra cuestión, la del centro del campo, es más peliaguda, porque al elegir entre Moi Gómez y Álex Bergantiños (cinco titularidades cada uno, alguna vez incluso han coincidido en el equipo inicial), Paco Herrera está escogiendo entre dos estilos futbolísticos e incluso entre dos sistemas diferentes.

Cuando escoge a Moi Gómez, Paco Herrera está apostando por el fútbol, por un perfil más creativo. Lo más habitual es que Sergio se quede solo como ancla entre dos líneas de cuatro y que el alicantino intente establecer conexión con jugones como Carmona o Rubén García para abastecer a los delanteros. Si el escogido es Bergantiños, Herrera está primando el abrigar al equipo, la seguridad defensiva como punto de partida. La del acompañante de Sergio, el único futbolista del Sporting que ha completado todos los minutos de Liga, es una decisión estructural, de esas que marcan la identidad del equipo.

Con una cuarta parte de Liga disputada, Paco Herrera ya ha dejado claro cuáles son sus hombres de confianza. Herrera siempre ha defendido la profundidad de su plantilla, pero el equipo tiene un esqueleto sólido.