Los vínculos que le unen al Sporting tienen una raíz más profunda de lo esperado. Rubén Baraja Vegas (Valladolid, 11-7-75) manejaba información de primera mano cuando aterrizó en Gijón, donde tiene una parte de su familia que siente muy próxima. También recabó informes de fuentes autorizadas como el Guaje Villa, Luis Enrique o Abelardo. Así se explican sus primeros guiños, que han dado lugar a un prometedor romance con el sportinguismo que se espera que dé frutos. Su mirada no alcanza más allá de Lugo, no quiere ni oír hablar del derbi, pero no se le escapa que el único objetivo asumible será el ascenso.

- Para el entrenador Rubén Baraja, ¿qué supone esta etapa en el Sporting?

-Una gran oportunidad. Supone un orgullo ser la persona que lidere este proyecto desde el banquillo y estoy muy contento, no sólo por el prisma que puede tener el Sporting ahora. También por lo que proyecta a futuro. Es un club con solera, histórico, con una base social brutal? Es un sitio magnífico para trabajar.

- ¿Lo enfoca como un trampolín o como un proyecto a medio plazo?

-Lo planteo como mi gran prioridad en este momento. Quiero aprovechar la oportunidad que me da el Sporting para crecer con el equipo, crecer con el club y tratar de ser partícipe del sentimiento del sportinguismo, eso es lo que a mí me emociona, que los aficionados vayan al partido creyendo en su equipo, que se identifiquen con él. Reenganchar a la gente es una de las claves para tener opciones de lograr el objetivo.

- ¿Qué nota le pone a su primer mes en el Sporting?

-No soy una persona de ponerme notas a mí mismo y menos en tan corto periodo de tiempo. Cuando llegas a un sitio lo más importante es que se genere un cambio. Después del estímulo, creo que el equipo ha tenido una respuesta y ese cambio nos ha dado la posibilidad de mejorar, de ir cogiendo confianza. Estoy contento de que ese proceso se desarrolle ganando.

- ¿Qué destacaría en positivo de su corta estancia en Gijón y qué tiene pendiente mejorar?

-Hay algo que para mí ha sido muy significativo y es que el equipo ha ido creyendo cada vez más en sus posibilidades, sobre todo en El Molinón. Es importante que el equipo se sienta cómodo en casa. En el debe, está el tratar de llevar esto fuera de casa. Si queremos aspirar a mirar hacia arriba, tenemos que dar un paso adelante fuera de casa y ser competitivos lejos de El Molinón.

- ¿Reconoce ya al Sporting que tenía en la cabeza?

-Estamos viendo cosas. Ante el Alcorcón el equipo ya fue capaz de tener continuidad en la posesión, de que la pelota sea nuestra amiga y nos ayude a crear ocasiones. Esto sumado a lo que ya teníamos de ser un equipo vertical y rápido.

- Lo que se ha encontrado en Gijón, ¿se ajusta a la idea que tenía desde fuera?

-La mayoría de las sorpresas han sido agradables. Para mí, al llegar aquí, lo importante era empaparme de todo lo que era importante para el club, por su identidad, por lo que significa para sus aficionados, conocer su idiosincrasia. Ya conocía un poco lo que es esta ciudad porque tengo familia aquí y tuve excompañeros y eso me ha ayudado mucho. Me he encontrado una gran predisposición, no sólo en los jugadores, también en todo el entorno del club.

- ¿Va a subir el Sporting?

-Vamos a pelear y vamos a trabajar por conseguir el objetivo máximo. Hay que ser responsable en este sentido, porque no veníamos de una situación en la que se pueda vender humo a la gente. Hay que reconocer que estamos en una situación de déficit de puntos con respecto al ascenso directo, pero vamos a mostrar la máxima ambición para pelear por el objetivo que serían esos dos puestos. Sinceramente, a mí, lo que más preocupa, es que el equipo tenga los argumentos futbolísticos y deportivos como para poder pelear por algo así. Decir que el Sporting va a lograr el ascenso directo, sería irreal ahora mismo, pero no lo descartamos, pensamos que con trabajo podríamos conseguirlo.

- ¿Se pone un objetivo de puntos a conseguir?

-No me lo planteo así.

- ¿Será el ascenso más caro que en temporadas anteriores?

-En este momento hay dos equipos consolidados en esos dos puestos de arriba y que han abierto una brecha. Nunca una diferencia es insalvable, yo he vivido remontadas impensables. Nosotros ganamos una Liga al Madrid cuando en marzo nos sacaba ocho puntos y le acabamos sacando siete. Todo va a depender de nuestro rendimiento y de nuestra mejora. A falta de veinte partidos, no es algo que me obsesione. Sí me obsesiona que el equipo crea en sí mismo.

- ¿Le preocupa más el Huesca o teóricos favoritos como Granada y Osasuna?

-A mí solamente me preocupa el Lugo. Y sobre todo mi equipo.

- ¿Qué le gustaría reforzar para ir con más garantías?

-Creo que el mercado de invierno tiene muchas dificultades. Es complicado encontrar jugadores que suban el nivel de la plantilla. Tenemos que buscar jugadores con un perfil muy determinado, como Jony que es un futbolista que quería venir, que conoce el club, que su aclimatación va a ser rápida y trae hambre. Por eso el club hizo un esfuerzo importante.

- En ese perfil podría encajar también Míkel Vesga?

-Es un gran futbolista y conoce la casa, se están valorando diferentes posibilidades. Todo lo que sean futbolistas que vengan a subir el nivel para nosotros sería fenomenal.

- ¿Vería bien alguna salida para tener más margen en el mercado?

-El mercado es el que nos irá diciendo. Lógicamente trataremos de ver todas las situaciones para saber qué es lo que puede pasar. Según lo que se vaya viendo, tendremos que ir tomando todo tipo de decisiones. El objetivo es que el 31 de enero hayamos hecho un equipo competitivo. Hay que buscar una plantilla corta, con 20 o 21 futbolistas, porque tenemos un filial de nivel alto.

- Se están quedando fuera de sus convocatori as dos centrales del primer equipo en beneficio de chicos del filial, ¿le gustaría apuntalar la defensa?

-Necesitamos gente predispuesta para dar el nivel que el equipo necesita en los minutos que sean y que se sientan con la posibilidad de ser titulares.

- ¿Hay un caso Scepovic?

-Yo creo que no. Llevamos aquí cuatro partidos y Stefan ha tenido la posibilidad de jugar en dos. Ahora tiene que trabajar para ganarse la posibilidad de volver a ser titular, como otros compañeros que se quedan incluso fuera de las convocatorias. Para mí es importante esa lucha en el día a día para ser titular. Estamos en un equipo de mucha exigencia, con unos objetivos importantes y no es fácil jugar en el Sporting. Hay que ganárselo.

- Ha venido su agente a Mareo, ¿se plantea una salida?

-Yo no tengo conocimiento de nada en ese sentido.

- ¿Qué le ha visto a Carlos Castro que no le vieron otros entrenadores?

-Es un chico especial en cuanto a que es de la casa y parece que siempre cuesta más apostar por él. Creo que tiene talento, que es joven, conoce el club, sabe lo que es jugar en el Sporting y nosotros le hemos dado la posibilidad de que libere ese talento. Él sabe que para seguir jugando debe tener un buen rendimiento y una gran actitud, hasta ahora lo ha demostrado. Quiero que siga creciendo, que sea ambicioso y que no se conforme.

- Usted siempre habla de equilibrio, ¿qué importancia le da a la recuperación de Sergio?

-Es una pieza básica. Tener un jugador que sabe interpretar el juego con y sin balón, que da consistencia al centro del campo, es un alivio en la estructura del equipo. Los partidos se ganan en el centro del campo. Además del rendimiento, es importante lo que contagia al resto de compañeros, necesitamos ese liderazgo.

- ¿Qué supone para usted el liderato del Sporting B?

-Es una noticia fantástica en todos los sentidos. Eso habla de una buena planificación desde el año anterior para hacer un equipo competitivo.

- ¿Considera a Nacho Méndez y Juan Rodríguez jugadores suyos ya?

-En este momento están en dinámica del primer equipo. Salvo que viéramos que no tienen continuidad en su proceso de mejora porque necesitan jugar, van a estar con nosotros. La posibilidad de que jueguen en el filial siempre está ahí, porque con esa edad necesitan jugar.

- Gran parte del sportinguismo sueña con un centro del campo con Sergio y Nacho Méndez?

-Se puede dar. Nacho es un chico que está en absoluto crecimiento, tiene 19 años, talento y posibilidades de crecer. Nosotros tenemos que ayudarle a llevar una progresión adecuada y razonable, sin presionarle y que se vaya sintiendo importante.

- Sobre Cristian Salvador hay que tomar una decisión en enero, ¿qué le parece?

-Es una situación que estamos valorando. Su rendimiento ha sido alto, es un futbolista que puede darnos consistencia en el centro del campo. Tenemos que tomar una buena decisión tanto para el Sporting como para él.

- En las dos próximas salidas va a conocer usted la Mareona

-Lo más importante es que la afición se sienta orgullosa de nosotros. Que un equipo baje y haga una cifra histórica de socios, representa lo que la gente quiere al Sporting y sólo espero que nosotros estemos al mismo nivel que ellos. Tenemos que ser nosotros los que le transmitamos a la afición nuestras ganas para conseguir una buena simbiosis. La gente de Gijón se hace sentir cuando va al campo y aprieta. Es algo que debemos aprovechar.

- ¿Qué le interesa más allá del fútbol?

-Me interesa todo en general. Sinceramente, vivir el fútbol con pasión te lleva muchas horas, te provoca hacer muchos sacrificios a nivel personal y es duro. Yo estoy aquí sin mi familia y acabo de tener un bebé, pero la ambición que uno tiene de crecer me hace que todo eso me reconforte. También es fundamental desconectar un poco de todo esto, buscar tus espacios. Me gusta leer, informarme, ver otros deportes, ver un partido de fútbol sin tener que analizarlo, hacer deporte y estar pendiente de la gente que te quiere. Soy muy curioso.

- ¿Ya siente la proximidad del derbi?

-Sinceramente, no. El derbi que tengo en la cabeza es el partido del Lugo. Todos somos conscientes de que ese partido va a llegar, pero me gustaría disfrutarlo cuando sea su momento. No ahora. Cuando llegue, lo afrontaremos con la mayor ilusión porque es un partido único y sabemos cómo lo vive la gente en Gijón.