"El Sporting es un equipo vertical y muy intenso y cuando coge el balón es rápido, dinámico y explosivo. El Sporting tiene ahora mucha velocidad para llegar al área rival". Eloy Olaya es uno de los exfutbolistas consultados por LA NUEVA ESPAÑA para valorar el cambio que ha sufrido el Sporting desde la llegada de Baraja al banquillo. Con el Pipo al frente, los rojiblancos han ganado diez partidos sobre catorce jugados, y en El Molinón han hecho pleno con ocho victorias y dejando en siete de ellos la portería a cero. Junto a la intensidad, dinamismo y la claridad de ideas, los exjugadores del club destacan también la importancia de contar con Jony en el equipo.

Pablo Álvarez indica sobre el futbolista de Cangas del Narcea que "en ataque da una profundidad y desparpajo que antes no se tenía". Aunque el que fuera extremo rojiblanco la pasada década resalta que la clave pasa por el estilo: "Ahora el equipo está definido y sabe a lo que juega, con un sistema y un once base, y están jugando los mejores y en su posición. Y el Sporting de cabeza está muy fuerte, y en Segunda el estado anímico es clave".

La llegada de Jony a Gijón ha supuesto un quebradero de cabeza para los rivales. "La mayoría de los aficionados no esperábamos un Jony tan involucrado y tan espectacular. Es un jugador que marca la diferencia y tenerle en Segunda es un lujo", destaca Claudio, portero rojiblanco en la década de los setenta y ochenta. "Para mí es clave la fortaleza en el centro del campo con Sergio y Álex Bergantiños. El equipo está con confianza y en Segunda tener el viento a favor es importante. Ahora el Sporting tiene una gran racha y los detalles también favorecen", añade Claudio.

Miguel Montes, que fue jugador y técnico del Sporting, señala directamente al nombre de Baraja como el responsable del cambio. A él le atribuye conseguir que "cada jugador sepa su misión, que corra todo el mundo y que trabajen todos para todos". Y explica también que el Pipo "puso el carácter que tenía jugando desde el banquillo y los jugadores se adaptaron inmediatamente a él", y ese carácter, explica Montes, se manifiesta "cuando en los partidos todos trabajan y defienden a muerte. No es casualidad que encajen pocos goles. Eso siempre te va a facilitar estar metido en la lucha por el ascenso a Primera".

El cambio de dibujo con respecto a los primeros partidos de Baraja al frente del equipo ha facilitado un mayor equilibrio y dominio. "Con la entrada de Rubén García en la mediapunta veo al equipo más conectado. Antes falta enganchar con los de arriba, y con Rubén en la banda el Sporting estaba más cojo y distante", comenta Iván Iglesias. El exjugador rojiblanco en la década de los noventa destaca que el Pipo ha impregnado al equipo "un carácter ganador" y lo argumenta explicando que "ahora los jugadores salen a los partidos sabiendo que son superiores al rival y que tienen que dominar en muchas fases. Es un tema de cabeza que ha inculcado Baraja".

Eloy Olaya, que además de jugador también fue secretario técnico del club, también destaca sobre Baraja que "ha sido coherente y ha puesto a cada jugador en el lugar donde verdaderamente rinde. Santos tiene que ser el punta de referencia y así lo está alineando". Y apoya su teoría con un ejemplo: "Cuando tuvo una lesión de un lateral no se volvió loco inventando y apostó primero por Juan Rodríguez, y como no le salió bien tiró del filial con Adri Montoro sin temblarle el pulso".