A José Alberto el 4-4-2 es un sistema que le motiva, que se adapta a la perfección a su filosofía de juego. Ya en el filial se encontró muy cómodo con este dibujo, y los resultados le acompañaron. Ese componente de valentía que tiene el técnico del conjunto rojiblanco se manifiesta a la perfección con la presencia de dos delanteros. Ya en sus tres primeros partidos, pese a no salir de inicio, en alguna fase del partido alineó a Djurdjevic y Blackman juntos. Hasta que hace tres jornadas optó por trasladar la idea al once inicial. Pero, sin embargo, el balance no ha sido del todo satisfactorio, con solo cuatro puntos sobre nueve logrados, cuando antes el Sporting obtuvo siete de nueve. Con Blackman yendo de más a menos, y con un equipo que quizás necesite algo más de equilibrio, José Alberto podría optar por recuperar el trivote en el centro del campo para los próximos partidos.

Mientras que Djurdjevic sí que ha ganado más presencia en ataque, con más ocasiones, pero solo un gol con un acompañante, Blackman ha pasado desapercibido. El delantero británico se ganó la titularidad tras animar al equipo en Granada y en la segunda parte frente al Tenerife, pero ante el Elche, tras fallar un penalti que se pidió para coger confianza, el británico se ha mostrado irregular. Es cierto que marcó el tanto del triunfo ante el Mallorca en El Molinón, pero se ha echado en falta que tenga una mayor presencia y participación en el juego, como sucede con el delantero serbio, que sigue teniendo la cuenta pendiente de lograr más goles.

El mercado invernal, en el que el Sporting está buscando otro atacante, podría hacer que el sistema 4-4-2 tenga continuidad, pero hasta que aparezca otro delantero que quizás dé más juego al equipo, la opción de retornar a un trivote es factible. En esa tercera pieza del puzzle, junto a Cristian Salvador y Nacho Méndez, podría aparecer Pablo Pérez. Antes ya actuó André Sousa, y Lod encajaría también a la perfección, pero el mediapunta gijonés tiene por delante la Copa del Rey para poder ganarse su oportunidad, como ya sucedió con Baraja en la primera vuelta.

Cambio hace un año

La temporada pasada Baraja, a su llegada, también apostó por jugar con dos atacantes. Lo hizo con Santos y Scepovic al principio, y después con Santos y Castro. Hasta que la derrota en el derbi ante el Oviedo le hizo cambiar a un sistema con un mediapunta hasta final de temporada. El sistema con dos delanteros es cada vez menos frecuente en el fútbol, pero, sin embargo, el pasado fin de semana tanto Sporting como Zaragoza lo utilizaron, con mejor resultado para los aragoneses. Ahora José Alberto deberá decidir si mantiene su apuesta, o retorna a su idea inicial.