Pedro Díaz fue una de las notas positivas del último partido de Liga del Sporting. En Anduva el centrocampista sierense no solo asumió el liderazgo en ataque, sino también en defensa. Pedro Díaz recuperó once balones, el que más de todo el partido. Y además ayudó al canterano Gragera, que disputó sus primeros minutos de esta temporada con el primer equipo. "Gragera afrontó el partido con mucha madurez. Estuvo muy fuerte y le vi muy bien en el campo", explica Pedro Díaz, que reconoció también que "le estuve mimando toda la mañana antes de jugar".
El partido ante el Mirandés fue el séptimo que disputa esta temporada Pedro Díaz con el Sporting, el cuarto como titular, y el segundo consecutivo de inicio. Su momento más destacado fue un bonito disparo desde la frontal, buscando la escuadra de Limones, que sacó una mano providencial en el último instante. "Nada más que salió el tiro pensé que iba para dentro, pero hay que saber que estamos en una división de mucho nivel, y con muy buenos porteros", afirmó ayer Pedro Díaz.
El primer partido que disputó esta temporada fue ante el Albacete, en la tercera jornada, con gol incluido y victoria del Sporting. Repitió la jornada siguiente en Huesca, donde fue expulsado. Y ahí perdió protagonismo, con cinco partidos sin jugar un solo minuto, hasta que tuvo participación en las segundas partes de los choques ante Fuenlabrada y Alcorcón.
Después le llegó otro periodo de inactividad, con cuatro partidos sin jugar, y en dos de ellos sin ni siquiera entrar en la convocatoria. Pero en el Carlos Tartiere, con la lesión de Nacho Méndez, entró al campo en los últimos minutos y mostró una gran versión, en especial con el balón parado. Los dos últimos partidos ante Tenerife y Mirandés fue titular. "Estoy muy concentrado, con la cabeza en el suelo, y con mucha ilusión y ganas", cuenta.
El Sporting lleva cinco partidos sin ganar, pero Pedro Díaz prefiere transmitir un mensaje de optimismo, y también de confianza en el papel de José Alberto. "El entrenador está muy unido y confía en nosotros, como nosotros en él, es algo mutuo", resalta.
Lo que más le preocupa al medio rojiblanco es poder conseguir un triunfo ante la Ponferradina que sirva para reconciliarse con la afición rojiblanca. "Más que una cuenta pendiente con nosotros mismos es con la afición y lo que mueve este equipo, con gente apoyándonos pese a la lluvia", indica. "Estamos con ansias de que llegue ya el siguiente partido", añade.
