Marcos Fernández: un espartano para Ramírez

"Es un ‘9’ de área. Pelea todas. Es un delantero muy trabajador", sostienen quienes conocen las virtudes del delantero Marcos Fernández, el juvenil de 18 años que ayer se llevó Miguel Ángel Ramírez a Albacete y que esta tarde (18: 30 horas) tiene de nuevo la opción de debutar con el Sporting en el Carlos Belmonte. De nuevo, porque el atacante, en dinámica con el Sporting C de Samuel Baños y Javi Fuego, ya fue incluido por el por el técnico canario en marzo de cara al duelo en El Molinón ante el Club Deportivo Mirandés. Tenía tan solo 17 años, pero Ramírez tiró antes de él que de otras opciones del filial –como sucede ahora– ante las bajas de Djuka, Campuzano e Ignacio Jeraldino. Ramírez cree en el potencial de este jovencísimo futbolista que poco a poco comienza a asomar la pata. "Es un luchador".

Marcos, capitán en distintas etapas del fútbol formativo en Mareo desde que llegó al club rojiblanco procedente del Luarca en 2017 –siendo alevín, pero ya dio el paso con el Infantil A–, fue alertado el jueves de la posibilidad de ser citado con el primer equipo. Fernández marcó 25 tantos en 19 encuentros con el Juvenil B, en su mejor temporada en la base, demostrando su potencial como uno de los delanteros con más olfatos que tiene en nómina Mareo. Otero sintió el jueves que algo no iba del todo bien en una de sus rodillas y advirtió al club de su estado.

Unas inoportunas molestias que, unidas a la lesión de Ignacio Jeraldino (también con problemas físicos) encendieron todas las alarmas en la entidad y provocaron la reacción por parte del cuerpo técnico. Ayer, Fernández fue la principal novedad del entrenamiento en Mareo, en una sesión que fue seguida de cerca por José Riestra, Israel Villaseñor y Gerardo García. Pero la confirmación de su inclusión en la convocatoria se hizo esperar unas horas más: Otero también saltó al campo del número 2, y formó parte de la sesión. Pero el atacante, una pieza clave en el ataque de Miguel Ángel Ramírez, mantuvo algunas molestias en la rodilla.

De forma consensuada con los servicios médicos y el cuerpo técnico, el de Sipí se queda en Gijón y no forzará para estar en el Carlos Belmonte. La decisión de mantener la prudencia es una praxis habitual en el actual staff, que aboga por reducir los riesgos para evitar que el daño sea mayor.

Analizando cambiar de sistema. Ramírez y su equipo de trabajo se han pasado las últimas cuarenta y ocho horas analizando cómo salir del paso: sobre la mesa está la opción de que compitan de mano por primera vez Víctor Campuzano y Uros Djurdjevic. Un binomio atacante sobre el que diseñó la planificación deportiva el club rojiblanco en enero de 2021, pero que apenas ha tenido protagonismo durante estas temporadas. Autor del 1-2 ante el Zaragoza, "Campu" fue titular en El Alcoraz ante la Sociedad Deportiva Huesca. Pero ese encuentro lo disputó de mano con Juan Otero. Las circunstancias han provocado que el debate sobre si debe jugar Djuka o Campuzano vire con la baja del cafetero en si Ramírez debe mantener la formación con dos delanteros o dar entrada a un tercer centrocampista, como Fran Villalba en el enganche, sin descartar un cambio de sistema para recuperar la solvencia defensiva ante un equipo muy ofensivo como el Albacete.

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