Oviedo, Luján PALACIOS

La fiscalía pidió ayer una suma de siete años de cárcel para dos ciudadanos rumanos que en diciembre de 2008 abandonaron un club de alterne en Santa Marina de Piedramuelle (Oviedo) a bordo de un vehículo, a gran velocidad, tras haber ingerido alcohol y golpear a una de las prostitutas.

Un tercer acusado, para el que la acusación pública solicitaba un año y medio de prisión, se enfrenta tras el juicio a una falta por la que deberá pagar una multa de 360 euros. El ministerio público imputa al primero de los acusados, I. D. B, dos delitos -de lesiones y de resistencia-, por los que le pide cuatro años y medio de cárcel, y para M. A. M., un total de dos años y medio por dos delitos de resistencia. La abogada de la defensa, Lourdes Iglesias, recurrirá, porque considera «excesiva» la pena de cárcel para sus clientes, quienes «siempre han sido muy respetuosos con la autoridad».

La letrada reclama que el tribunal tenga en cuenta la «atenuante o eximente» de alcoholemia en la agresión contra la prostituta, puesto que, aunque fue golpeada, «no hubo intencionalidad». Además, criticó la actuación de la Policía Local de Oviedo, ya que «en ningún momento indicaron a mis clientes por qué estaban siendo detenidos». Según la fiscalía, los hechos tuvieron lugar en la madrugada del 2 de diciembre de 2008, cuando M. A. M. se encontraba en el club Fresas con una prostituta a la que insultó y agredió con un vaso. En compañía de los otros dos acusados huyeron en un vehículo conducido por el primero de éstos, que estaba bebido. El coche se incorporó a la carretera a gran velocidad, invadiendo el carril contrario de la N-634 ante la Policía Local, alertada por un encargado del club. Una vez interceptados se negaron a identificarse y a salir del coche, intentaron agredir a los agentes y se negaron a realizar el test de alcoholemia.