Dos bomberos resultaron ayer heridos -uno de ellos de gravedad- tras sufrir un accidente de tráfico cuando circulaban con un vehículo todoterreno, que acabó volcado sobre la carretera. El suceso se produjo en un tramo desdoblado de la AS-17, en Langreo, a la altura de la salida hacia Riaño y a la autovía de los túneles.
El bombero con heridas más graves fue trasladado al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), mientras que el segundo fue atendido en el Hospital Valle del Nalón, situado a un kilómetro escaso del lugar de los hechos.
El suceso, tal y como informó el 112-Asturias, se considera un accidente laboral, ya que los dos bomberos se dirigían a apoyar una intervención en el concejo de Siero. El herido trasladado al HUCA presentaba un traumatismo torácico de pronóstico grave, aunque si no surgen complicaciones la vida del bombero no corre peligro. Su compañero, atendido en el Hospital del Nalón, también tenía un traumatismo torácico, en este caso de pronóstico reservado.
El accidente se produjo poco después de las seis de la tarde. El centro de Emergencias de Asturias recibió varias llamadas alertando del vuelco de un vehículo de Bomberos entre Barros y Riaño y de que podía haber personas heridas.
Hasta el lugar de los hechos se desplazaron una uvi móvil, que se encargó de llevar al herido de mayor gravedad a Oviedo, y una ambulancia de soporte vital básico, que trasladó al segundo bombero hasta el Hospital Valle del Nalón. De lo ocurrido se alertó "a la autoridad laboral competente" y también a la Guardia Civil de Tráfico. Precisamente, la Benemérita tuvo mucho trabajo mientras duró la intervención de los servicios médicos y de emergencias.
El vuelco del vehículo -un todoterreno cuya parte trasera no tiene techo fijo y se tapa con una lona- se produjo en plena autovía de Langreo, a una hora a la que el tráfico empieza a intensificarse. La Guardia Civil de Tráfico se vio obligada a regular la circulación, lo que acabó ocasionando retenciones importantes en el sentido hacia Siero y Oviedo. Las colas de coches llegaban más allá de la entrada a la autovía desde La Felguera, prácticamente un kilómetro. Los carriles de entrada a Langreo, sin embargo, no se vieron afectados por los atascos. Hacia las siete y media se recobró la normalidad.
