Es el nuevo y tiene que sufrir. Eso parece que pensaron hoy las cuatro chicas que concursaron el Boom, el programa de las tardes de Antena 3 seguido cada día por millones de personas. Ni cortas ni perezosas las jóvenes que estaban intentando batir a Los Lobos (el grupo de amigos que ha batido récord mundial de permanencia en un programa de televisión), se vieron en la tesitura de tener que expulsar a uno del grupo rival y no lo dudaron. Se tenía que ir Alberto San Frutos, el profesor que acaba de llegar a la televisión en sustitución de uno de los miembros el equipo que se tuvo que ir por motivos personales.

Las chicas llegaron incluso a razonar su explicación. “Todos los de Los Lobos nos dan miedo. Todos son igual de inteligentes no podemos elegir a uno para que deje de concursar si no es por descarte. Para dejar a los que empezaron juntos y echar al nuevo elegimos que se vaya Alberto”, confesaron. Lo cierto es que su razonamiento tenía lógica.

San Frutos lleva apenas unos programas después de que el ganadero zamorano José Pinto se viera obligado a abandonar el concurso. Dicen los más seguidores del programa (en este enlace lo puedes leer) que fue por razones de ruptura del acuerdo contractual con la cadena. Al parecer Pinto había firmado no ceder su imagen para otras marcas y protagonizó una campaña de publicidad

Sea cierto o no lo que es real es que Los Lobos han marcado un antes y un después en la televisión en España y lo siguen haciendo. Y no sólo por su inteligencia y permanencia en pantalla. De hecho no sólo destaca todos los programas que llevan emitiendo en Antena 3. También el apoyo que reciben de la calle y las audiencias que generan. De hecho en varias ocasiones han logrado algo que hasta la fecha no parecía posible y es que Antena 3 supere en audiencia al tan temido Pasapalabra. El concurso de la principal cadena de Mediaset llegó a caer varios días por culpa de la competencia que formaban desde el grupo de Los Lobos. Ahora cada uno podría llevarse con todo el dinero que tiene acumulado más el bote casi un millón y medio de euros a su casa. Descontando, eso sí, lo que tiene que dar cada uno de ellos a Hacienda que también se llevará parte de su premio en forma de impuestos. Eso sí sin haber concursado.