Una forma física envidiable, habilidades sociales, dominio del medio acuático y un alto grado de responsabilidad son las características del «socorrista 10». Las playas asturianas cuentan con un gran número de profesionales cuya misión consiste en velar por la seguridad de los bañistas, así como atender cualquier incidencia que pueda producirse en los arenales. Para llevar a cabo este trabajo el personal de Salvamento debe cumplir unos requisitos básicos, algo de lo que es buen conocedor José Palacios Aguilar, vicepresidente de ADEAC-Banderas Azules de España, doctor en Educación Física y profesor del INEF en la Universidad de La Coruña, que ayer impartió las conferencias «Condiciones ideales del socorrista en la playa» y «El socorrista bandera azul» en el Centro de Recepción de Turistas Comarca de Avilés.
José Palacios Aguilar explicó a LA NUEVA ESPAÑA cuáles son los requisitos indispensables que debe cumplir un socorrista para poder ejercer esta profesión. Cuatro condiciones necesarias que, a su modo de ver, garantizarían la profesionalidad de los socorristas acuáticos.
En primer lugar, un socorrista debe dominar el medio acuático, lo que no implica únicamente ser un experto nadador, sino también tener un dominio de habilidades como el buceo, el traslado de personas heridas o inconscientes, y saber comportarse en función del estado del mar. También debe tener un alto conocimiento de las corrientes marítimas y de cómo actuar dependiendo del tipo de olas.
El segundo requisito indispensable consiste en tener una buena condición física, que abarque desde la agilidad y la fuerza hasta la resistencia y la velocidad en carrera. Un socorrista ideal además debe conocer y dominar las técnicas de socorrismo acuático y de primeros auxilios. Tiene que ser capaz de prever los riesgos y saber cómo tratar a los accidentados y a sus familiares. Es importante que tenga facilidad para relacionarse con las personas y saber cómo comunicar a los bañistas una situación de peligro.
La meteorología también es una asignatura fundamental para los socorristas. Conocer con anticipación un posible cambio en las condiciones del tiempo ayudará a evitar situaciones de riesgo o incluso accidentes. El requisito más importante, según José Palacios Aguilar, es «la condición humana». Un socorrista debe tener un fuerte sentido de la responsabilidad ante el trabajo y respeto hacia los demás, pues, según el experto, si una persona posee estas cualidades, el resto puede aprenderlas.
