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Surf a remo

Tabla rasa en el Sella

Melissa Pérez se convierte en la primera mujer que culmina el Descenso Internacional en la novedosa modalidad de surf a remo, una experiencia que supone «un reto sobre todo mental», según la surfista

Tabla rasa en el Sella

Gijón, R. NOGUEIRA

«No fui consciente de que era la primera hasta que me lo dijeron», confiesa Melissa Pérez, coordinadora de los cursos de Gijón de la Escuela Asturiana de Surf, la primera mujer que consigue el reto de culminar el Descenso del Sella en la modalidad de surf a remo. «Por la experiencia que tuve en el Sella, el reto es más que nada mental, de voluntad», explica esta joven, heroína de una modalidad deportiva acuática que va ganando adeptos en practicantes de ambos sexos.

El resumen de la prueba podría quedar así: cuatro horas sobre una tabla de surf hinchable movida por un remo y, como cuenta Melissa Pérez, «un fuerte viento Nordeste en contra que nos impidió avanzar a duras penas». Pero el Nordeste no fue suficiente para frenar a los integrantes de la Escuela Asturiana de Surf que compitieron en una prueba que, para esta modalidad, requiere de una enorme resistencia física. «El stand up paddle (SUP) o surf a remo es un deporte que te aporta bastante tranquilidad y motivación», señala Melissa Pérez, la primera mujer que supera, en surf a remo, el recorrido íntegro del mítico río desde Arriondas hasta Ribadesella. «Es el segundo año que la escuela participa, y creo que esto va camino de convertirse en una tradición», vaticina la joven.

«El surf a remo y sus practicantes, también conocidos como gondoleros, proceden de la Polinesia», cuenta Melissa Pérez sobre el novedoso deporte que causa furor en medio mundo. «Sus posibilidades, en aguas tranquilas y de interior como lagos, pantanos y ríos o de exterior como en el Mediterráneo, están suponiendo un auténtico boom como alternativa al surf», añade. A pesar de ser un deporte que cobra actualidad tras esta proeza, «se trata de la prueba de deslizamiento acuático más antigua de la historia, en la que el navegante se desplaza con la ayuda de un remo mientras permanece de pie sobre la tabla», explica.

Melissa comenzó a practicar este deporte hace apenas un año y se enamoró de él desde el primer momento. «Me enganché a esta modalidad de surf, ya que para mí tiene bastante en común con la montaña, mi gran pasión», reconoce la surfista. Para ella, los elementos comunes del montañismo y el surf a remo son «la libertad que te aporta, el poder contemplar y admirar el paisaje y el espíritu de superación...».

Hace ya dos años que la escuela de surf imparte esta modalidad como complemento a sus cursos tradicionales. Hugo Suárez se encarga de impartir los cursos de surf a remo. «Se convirtió en instructor de la especialidad en la primera promoción a nivel europeo», explica Pérez. Hugo y Gonzalo Canga finalizaron el recorrido del Sella con Melissa. «Hugo fue el pionero en realizar el Descenso Internacional en esta disciplina y este año buscó rizar el rizo con el hinchable», apunta Pérez.

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