El escritor y periodista Carlos Salem, bonaerense de 1959 que reside en España desde 1988, compone con su pañuelo a la cabeza una de las imágenes habituales de la "Semana negra", donde ha puesto en marcha unas veladas poéticas de amplia aceptación. Este año ha llegado a Gijón, además, con la novela "En el cielo no hay cerveza" (Navona) y un discurso sobre los usos y abusos televisivos de la España actual, asi como sobre la pérdida social de la capacidad de sorpresa. "La telebasura es algo más grave de lo que parece", afirmó.

Salem, que dirigió periódicos en Ceuta y Melilla, explicó que su nuevo libro es, también, un homenaje a Raymond Chandler y a una de sus obras maestras, "El largo adiós", un clásico del género negro. El escritor, que tiene curiosas teorías sobre la novela negra española ("se mata mucho y se folla poco"), quiso recordar también a Enrique Jardiel Poncela y su "La tournée de Dios".

Puso el énfasis, no obstante, en combatir la telebasura y sus "peligros": "Resulta increíble ver lo que la gente está dispuesta a hacer para ser famosa". Y recordó un mundo y una época en los que la gente aún salía en la televisión "porque tenía algo que decir".