Los últimos meses han sido, sin duda, los peores en la vida de Britney Spears en lo que a su estabilidad emocional se refiere. Sin embargo, éste no ha sido el único aspecto en el que la cantante ha sufrido grandes altibajos, puesto que, tal y como pudo saberse ayer, sus problemas psiquiátricos también han afectado, y mucho, a su cuenta corriente.

Según los cálculos de su padre, que le lleva las cuentas, la princesa del pop ha perdido 39,3 millones de euros desde que comenzaron sus problemas. Por una parte, la pérdida de la custodia de sus dos hijos, que comparte con el también cantante Kevin Federline, y su ingreso en un psiquiátrico la obligaron a gastar cuantiosas sumas de dinero, tanto en los tribunales como en su recuperación.

Pero, por otra parte, las estimaciones valoradas por su entorno apuntan a que Britney, de 26 años, perdió la oportunidad de recibir unos 32 millones de euros al no haber promocionado su nuevo disco, «Blackout», tal y como estaba previsto.

Sin embargo, a pesar de estas pérdidas, los estrictos controles que su padre hace de sus cuentas están consiguiendo que la economía de la cantante vuelva a su cauce, según aseguró Music News a «Otr/press».