El acuerdo de extradición entre Estonia y Estados Unidos fue el gran protagonista de los premios del Cine Europeo, ya que el cineasta Roman Polanski agradeció por videoconferencia tres de los seis galardones para su película «El escritor», en una gala en la que el cine español se fue de vacío. Tras el «Oso de plata» recibido en Berlín en febrero y que no pudo recibir por estar bajo arresto domiciliario, el realizador de origen polaco, de 77 años, volvió a recibir el apoyo de la comunidad artística en Tallín por su película «El escritor», protagonizada por Ewan McGregor y Olivia Williams.

Con un juicio pendiente en Los Ángeles desde 1978, que le acusa de abusar sexualmente de Samantha Geimer, quien tenía entonces 13 años, Polanski no se ha arriesgado a repetir la experiencia del año pasado en Suiza, donde fue detenido cuando fue a recibir un homenaje en el Festival de Zúrich, y agradeció los premios a través de videoconferencia. Vestido con camiseta y desde una cámara web, Polanski agradeció el premio a esta película «con equipo netamente europeo» y lamentó «no poder estar en Tallín para recoger estos premios».

Mejor película, mejor director, mejor actor (para el escocés Ewan McGregor, que está rodando en Tailandia con Juan Antonio Bayona «Lo imposible»), mejor guión, mejor dirección artística y mejor banda sonora compusieron el monopolio de Polanski en Estonia. La Academia se ha rendido a un elegante «thriller» político en el que el realizador reflexiona sobre las cortinas de humo del poder.