La andaluza Pilar Albarracín llenó de flamencas las calles de París, llegadas directamente de Sevilla en avión, con sus trajes de faralaes y listas para unirse a la performance "En la piel del otro" con motivo de la Nuit Blanche que se celebraba ayer en la capital francesa. Albarracín, cuya obra se muestra estos días en Laboral Centro de Arte de Gijón en la colectiva "Equivocada no es mi nombre", eligió en París entre todas sus batas de cola una que perteneció a Lola Flores.