Billie Eilish pidió una orden de alejamiento contra un fan que acudía repetidamente a su casa, informó el medio especializado en noticias de famosos TMZ. Como respuesta, un juez concedió a Eilish una orden de alejamiento temporal contra este seguidor que la acechaba hasta que se decida finalmente sobre el caso.

Este fan deberá permanecer por el momento a más de 182 metros de la cantante y de sus padres y, además, tendrá que detener cualquier tipo de contacto con ellos.

Según el relato de la artista y su familia, un joven llamado Prenell Rousseau, de 24 años, apareció por primera vez en su casa el pasado lunes, llamó al timbre y preguntó si ahí vivía Billie Eilish. El padre de la cantante le dijo que se había equivocado de casa, pero el fanático volvió a las nueve de la noche mostrando "un comportamiento errático".

"Mientras esperábamos a que llegara la seguridad, Rousseau se quedó en nuestro porche, se sentó y comenzó a leer un libro mientras continuaba entablando un monólogo periódico. Mi padre le pidió en repetidas veces que se fuera, pero él se negó", dijo. Rousseau acudió siete veces en total a la casa, cinco de las cuales no llevaba la mascarilla que las autoridades requieren para evitar la propagación del coronavirus.

En las otras dos ocasiones sí llevaba mascarilla, pero se la quitó para hablar con los miembros de la seguridad.

La Policía se llevó en dos ocasiones a Rousseau, quien, finalmente, tomó un billete de autobús de vuelta a Nueva York, donde vive.