Sonriendo, relajada y sin su inseparable hermano Agustín. Así se ha dejado ver Isabel Pantoja por las calles de Córdoba durante unos días, describe la revista "Lecturas" en su portada de esta semana. Según la misma, allí tiene desde hace años un fiel grupo de amigas que forman parte de ese círculo más íntimo que no falla nunca a la artista. Con una de ellas especialmente, cita la revista, derrocha complicidad y paseó cogida del brazo. Gracias a ella, Isabel pudo tratarse la infección de iris que a punto estuvo de dejarla ciega de un ojo hace un año. Además según han confirmado algunos medios, la tonadillera buscó refugio en el entorno de sus amigas cordobesas durante la polémica desatada por su ausencia en la boda de Isa Pantoja. "La hemos visto pasar días en Córdoba. Es destacable por dos motivos: primero, no está Agustín; segundo, salió de Cantora conduciendo su propio coche hasta Córdoba. Hay muchísima sintonía, muchísima amistad. Es una Isabel Pantoja muy feliz, que hacía mucho tiempo que no veíamos".