Óscar es uno de esos concursantes que ha nacido para estar en un plató de televisión. El nuevo rival de Moisés en Paspalabra es todo un experto ante las cámaras y un sabio a la hora de demostrar sus conocimientos.

Óscar ya se curtió en el concurso presentado por Roberto Leal en su primera época allá por los 2000. Con Silvia Jato como presentadora, el madrileño vivió su "bautizo" en los concursos de televisión. "Era una época un poco más inocente porque acababa de empezar el formato, que era divertidísimo", comenta. No obstante, ya había "cosas en común con lo que tenemos ahora", según ha contado en una entrevista que ha concedido al programa. También tiene un curioso recuerdo del momento de El Rosco: "Nos ponían unos casquitos, que no aislaban pero supongo que estéticamente quedarían bastante bien de cara a la televisión".

El concursante llegó en un momento de incertidumbre al programa. Fer, el gran rival de Moisés cababa de ser eliminado y, justo un día después, óscar terminaba con las esperanza del verdugo de Fer en la silla azul.

Su llegada al plató ha vuelto a reavivar la llama de aquellos apasionantes duelos entre Orestes y Rafa, donde en cualquier programa cualquiera se podía alzar con el bote, aunque finalmente fue Rafa quién consiguió más de 2 millones de euros en una jugada espectacular. En cuanto a su futuro en Pasapalabra, óscar dice no tener claro si tienes oportunidades para conseguir el tan ansiado premio final. Sin embargo, asegura que ganar el bote es ya palabras mayores. "Ahora mismo lo veo muy complicado y estoy aplicando un eufemismo tremendo, lo veo incluso fuera de mi alcance", asegura. Y, aunque insiste en que es de momento "una entelequia absoluta", deja una ventana a la esperanza: "Cierto es que, a veces, los astros se alinean", cuenta en la entrevista.