Los accidentes de tractor, un suceso demasiado frecuente en Asturias: "La cabina es el espacio que te puede salvar la vida"

Los tractores antiguos frenan poco, solo las dos ruedas traseras, y son difíciles con conducir sin dirección asistida

tractor seguridad

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El trágico fallecimiento de los dos vecinos de Villaviciosa ha vuelto a poner sobre la mesa lo que muchos en la zona rural ya saben: los tractores son vehículos peligrosos en según qué terrenos, dependiendo de su tamaño y de su antigüedad. De hecho, en casi todos los concejos de la Asturias rural los lugareños tienen en el recuerdo algún suceso con resultado de muerte con este tipo de vehículos, en los que los riesgos se disparan en el caso de ser viejos y no contar con las medidas de seguridad pertinentes.

"Este tipo de maquinaria ha mejorado mucho, pero no podemos olvidar que el peligro existe, y muchas veces está en el propio conductor: la prudencia siempre debe ser lo primero". Así lo explica Eloy Fernández, de la ganadería Balberán de San Román de Sariego, que posee un tractor moderno, con numerosas medidas de seguridad incorporadas. En el lado contrario, su vecino José Antonio Palacios es dueño de un pequeño tractor para las labores de la huerta de más de 50 años de antigüedad, que, como muchos en la región, no cuenta con tales adelantos.

Los tractores más pequeños son más estrechos, y por lo tanto "vuelcan más fácil. Las fincas en ladera son un peligro grande, hay que conocer muy bien el vehículo y el terreno". Porque un vuelco con un tractor pequeño equivale a un gran problema: no tienen cabina, y "si no puedes tirarte fuera con agilidad, te aplasta".

A ello se suma que los tractores más antiguos frenan mal, en algunos de ellos solo las dos ruedas traseras, y la mayoría tampoco cuentan con transmisión hidráulica ni dirección asistida, lo que dificulta mucho la conducción en los modelos más vetustos.

Los regatos y sucos tan frecuentes en las empinadas fincas asturianas son el principal riesgo para el manejo de los tractores. "Tienes que mirar muy bien dónde pisas, y andar con ojo porque volcar es un momento, el tractor tiene mucha fuerza y sigue tirando a pesar de que tenga poca potencia, porque la relación de marchas es muy corta", resume Palacios.

La maquinaria de última generación ya viene preparada para sortear los riesgos con mayor seguridad. Lo principal para los profesionales es "la cabina: es el espacio que te puede salvar la vida en caso de volcar. Vienen homologadas para soportar un buen golpe, pero siempre hay que ser consciente de que un tractor no se puede meter en cualquier parte, mejor no arriesgar", explica Eloy Fernández.

Su vehículo cuenta con un sistema de frenado moderno sobre las cuatro ruedas, así como con un inversor hidráulico para cambiar el sentido de la marcha sin hacer uso del embrague, lo que repercute en una mayor facilidad de maniobra, y con mucha más seguridad porque "dependes mucho menos del freno".

Asimismo, lleva incorporado un cinturón de seguridad y sistemas de alarma acústica que avisan, por ejemplo, "si te levantas del asiento y no has puesto el freno de mano antes".

Con todos los adelantos actuales conducir un tractor moderno es "hasta más fácil que un coche", con la enorme diferencia de que nadie metería un utilitario en un prado en cuesta. "Los tractores de gran tamaño agarran más, pero todo tiene un límite".

Y la cosa se complica mucho cuando se les añaden remolques y aperos, que en ocasiones suponen un enorme peso añadido que tira del tractor y puede desestabilizarlo, incluso en situaciones de menor riesgo aparente.

En resumen, quienes llevan muchos años manejando este tipo de vehículos alertan de la necesidad de ir con cuidado y "no arriesgar". Y, en la medida de lo posible, hacerse con tractores que cuenten, al menos, con una buena cabina.

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