La procesión de la Soledad de Luarca duró este año una hora y veinte minutos y ganó fieles. La cita más madrugadora de la Semana Santa luarquesa (la procesión empieza a las ocho de la mañana), fue seguida por decenas de personas. Con ella se cierran los itinerarios que llegan hasta la capilla de La Atalaya, donde descansan todo el año el Nazareno y las imágenes que salieron esta mañana: La Verónica, San Juan y La Dolorosa.