Oviedo, M. J. IGLESIAS
El frío polar que alcanzó ayer la Península y llegó a Asturias en las horas centrales del día, dejó copiosas nieves en la región y una sensación general de invierno adelantado en los pueblos y ciudades del Principado. A lo largo de la tarde, las calles de los principales núcleos urbanos -Oviedo, Gijón, Avilés, Mieres, La Felguera y Sama, en Langreo- se llenaron de viandantes con abrigos, gorros, paraguas y botas de agua. Una estampa que será habitual en los próximos días, con un progresivo descenso de los termómetros.
Las bajas temperaturas continuarán al menos durante toda la semana. Asturias despedirá noviembre con mínimas de cuatro grados y recibirá diciembre con valores aún más bajos, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). El brusco descenso de los termómetros quedó patente en el puerto de San Isidro, donde a primera hora de la tarde se registraba un grado bajo cero. La urbanización de la Raya, en las proximidades de la estación invernal, presentaba un aspecto típico de postal prenavideña. Precisamente los esquiadores serán los más beneficiados por el «mal tiempo», que les permitirá practicar el deporte blanco este fin de semana. La estación de San Isidro, en la vertiente leonesa de la Cordillera, tiene previsto abrir el próximo sábado, 1 de diciembre, mientras que Pajares y Fuentes de Invierno, en Asturias, lo harán el jueves 6 de diciembre, festividad de la Constitución y primer día del puente que se prolonga hasta el 8, día de la Inmaculada.
La Agencia Estatal prevé para hoy en Asturias cielos cubiertos y chubascos débiles acompañados de tormentas con granizo, principalmente en el litoral. Nevará entre los 800 y los 600 metros y helará en las zonas montañosas. Para aderezar el «cóctel» de frío soplará viento del Norte y Noroeste, más fuerte en la costa oriental.
En cuanto a las temperaturas en las principales ciudades de la región, Oviedo registrará una mínima de 4 grados y una máxima de 9; en Gijón se oscilará entre la mínima de 6 y la máxima de 11, y Avilés, entre una mínima de 5 y una máxima de 10. La entrada del nuevo frente trae, en general, una bajada de las temperaturas de hasta 6 grados en todo el país a partir de hoy, según indicó el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología, Alejandro Lomas.
Además, la región, junto a otras 30 provincias, estará hoy en alerta por nieve, oleaje, precipitaciones -que serán localmente fuertes o persistentes en el litoral- y viento. Protección Civil activó ayer las alertas para avisar de la entrada del flujo de aire polar, que también se ceba con otras zonas de Europa, y que provocará un desplome de los termómetros con cotas de nieve que descenderán a los 600 metros, lo que da lugar a que las nevadas «cuajen», dejando las primeras estampas blancas, netamente invernales.
El meteorólogo José Antonio Maldonado indica que no es extraño que en esta época los vientos fuertes produzcan precipitaciones de tanta intensidad como para que las temperaturas desciendan de forma generalizada hasta dar lugar a nevadas.
Tanto Maldonado como el portavoz de Aemet coinciden en señalar que esta situación es «normal» de finales de noviembre y que se trata de la «primera entrada invernal» que sufre la Península. Lomas matiza que «los mayores cambios» se producirán entre hoy y mañana y se mantendrán, por lo menos, hasta el viernes, «cuando se espera la entrada de un nuevo frente».
El descenso más acusado de las temperaturas se producirá en el extremo oriental peninsular, «donde bajarán más de seis grados», según Lomas, quien ha añadido que, en el resto del país, los termómetros perderán «entre dos y seis grados». De cara a mañana, miércoles, el descenso será «ligero a moderado» en Canarias y Baleares, con pocos cambios en el resto. «No va a hacer bueno en ningún sitio», agregó el portavoz de la Aemet. A modo de ejemplo, señaló que, para el miércoles, el descenso será de entre dos a tres grados en el Cantábrico en comparación con las temperaturas de ayer, lunes. Lomas no duda de que se trata de valores «propios del invierno meteorológico», que se ha adelantado a la estación.
