Oviedo, M. J. IGLESIAS

El invierno se estrena hoy en Asturias con temperaturas agradables y cielos despejados. La tónica se mantendrá durante el fin de semana, con valores que oscilarán entre los 16 y los 17 grados de media. La climatología dará un giro el lunes por la tarde con la entrada de un frente frío, pero a partir del miércoles regresará una especie de «primavera» en invierno.

Los datos, aportados ayer por Manuel Mora, delegado de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Asturias, indican que en las próximas fiestas no se esperan fenómenos climáticos adversos como olas de frío o nevadas copiosas, un dato que siempre merece la pena tener en cuenta en unos días en los que serán frecuentes los desplazamientos por carretera.

El calor del fin de semana va ligado al viento del Sur que precederá a la entrada de la borrasca que llegará a Asturias el lunes por la tarde, con lluvia y un frente frío. La cota de nieve se situará entonces en torno a los 1.300 metros.

El ascenso de las temperaturas comenzará a notarse hoy, aunque aún habrá intervalos nubosos con precipitaciones débiles y ocasionales, más probables en el Occidente.

En cuanto a las temperaturas en las principales ciudades de la región, Oviedo registrará una mínima de 10 grados y una máxima de 15, en Gijón se oscilará entre la mínima de 13 y la máxima de 16 y Avilés tendrá una mínima de 12 y una máxima de 15.

En general, el invierno, que se prolongará hasta el 21 de marzo, será «normal» en temperaturas en relación con los datos de los treinta años (1971-2000) que toma de base la Aemet para realizar sus valoraciones. Habrá borrascas atlánticas, nevadas y episodios de viento en las costas, lo habitual.

Aunque las previsiones a largo plazo son orientativas, tal como indicó Mora, de cumplirse, el invierno que comienza no tendrá incidencias destacables. El precedente registró su temperatura más baja el pasado 12 de febrero, con 12,4 grados bajo cero en el puerto de Leitariegos. El valor más alto del año que concluye se registró en San Antolín de Ibias el 9 de agosto, cuando se alcanzaron los 39 grados. El récord de viento se produjo en Ouria de Taramundi el pasado 14 de noviembre, con rachas que alcanzaron los 141 kilómetros por hora. Manuel Mora también indicó que el récord de lluvia tuvo lugar en Sotres, donde en 24 horas se recogieron 157 milímetros por metro cuadrado.

Mora constató que, a pesar de que las temperaturas de 2012 se mantuvieron dentro de los valores medios, el cambio climático es un hecho constatado e innegable. «Está claro que hay un incremento de la temperatura media del planeta y así lo indican los estudios que se han realizado hasta ahora», señaló. La temperatura media ha subido en los últimos cien años 0,7 grados, que, aunque no lo parezca, es mucho.