Más economía que diversión en la apertura del curso político del PSOE asturiano y duras críticas al Gobierno central. El presidente del Principado, Javier Fernández, acusó de «insolidario» a Mariano Rajoy por limitar las cuentas regionales. La consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, calificó de «injusto» el reparto del déficit fijado por Cristóbal Montoro. y el diputado Antonio Trevín auguró que las obras de la Variante de Pajares «estarán paradas en unas pocas semanas». Los socialistas dieron ayer el relevo a la tradicional cita del sindicato minero SOMA en Rodiezmo con la Fiesta de la Rosa, recuperada por la agrupación de Oviedo tras varios años en el olvido. Poco que ver entre ambas celebraciones. Eso sí, «La Internacional» sonó en las instalaciones del Fundoma ovetense igual que hace un año en la campa de la Tercia leonesa.

El Gobierno regional inicia el nuevo curso político como acabó el anterior, con reproches al Ejecutivo de Rajoy en clave económica. «Nos imponen un techo de déficit lesivo, arbitrario e injusto para los intereses de Asturias», cuestionó Javier Fernández, mucho más suelto ayer en el arte de la oratoria que en aquel discurso que dio en la campa de Rodiezmo hace tres años, cuando ya se barruntaba su candidatura a la Presidencia del Principado. Eso sí, por si hubiera alguna duda o tentación desde otras fuerzas políticas regionales, Fernández descartó que vaya a rebelarse de alguna manera, saltándose los márgenes dictados por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en caso de que no prospere el recurso ante el Tribunal Constitucional. «Incumplir la ley no es una opción», recalcó el también secretario de la Federación Socialista Asturiana (FSA). «Lo cumpliremos, aunque es una obligación que se nos impone», asumió el presidente regional.

Antes, su consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, había hecho un esfuerzo didáctico para explicar a los congregados en el patio del antiguo Orfanato Minero lo necesario que es contar con unas décimas más de déficit en la actual coyuntura económica. «Tener más o menos déficit es tener más o menos presupuesto y más recursos para poder apoyar a las empresas a que generen empleo, para poder realizar inversiones y para poder destinar dinero a la educación, la sanidad y los servicios sociales. Ahora es cuando las autonomías más necesitamos esos recursos y cuando tenemos más limitada esa capacidad», lamentó la consejera de Hacienda, que reprochó al Gobierno central el «nulo» compromiso con una región «que ha venido realizando una gestión financiera responsable. Asturias no pide un trato de favor sino que reclama lo que le corresponde por ley». Y precisó que el Principado «dejará de recibir 200 millones de euros anuales hasta 2016» por el reparto «injusto y desequilibrado» del déficit decidido por Montoro para reiterar que Asturias recurrirá esa decisión en los tribunales.

Javier Fernández avanzó que frente a las imposiciones del Gobierno central, los objetivos de su gobierno para el curso que ahora comienza serán «la estabilidad institucional y presupuestaria».

Economía aparte, Javier Fernández reivindicó los principios de su partido en los terrenos del Orfanato Minero, creado por iniciativa del sindicato minero SOMA en tiempos de Manuel Llaneza y de Ernesto Winter. «Somos más que unas siglas, aquí hay raíces muy profundas». El secretario de los socialistas asturianos no desaprovechó la ocasión para mandar un par de recados a los dirigentes de la derecha asturiana y al mismo Rajoy, a quien criticó su actitud de «sentarse en la orilla a esperar a que suba la marea». A la popular Mercedes Fernández, a la que sí nombró, le pidió que «al menos no se ponga del lado del Gobierno central en contra de los intereses de Asturias, justificando lo imposible». Y al forista Francisco Álvarez-Cascos, al que se refirió como «el otro», para ironizar con que «ahora está distraído con Gibraltar. ¿Os acordáis de Perejil, al alba y con fuerte viento de Levante?». Javier Fernández se imaginó a «él», otra vez en alusión a Cascos sin nombrarle, «y a Pelayo Roces envueltos en la bandera y con madreñas de camuflaje. Son gente de cantares de gesta, pero entre la épica y el ridículo hay un paso y ellos ya lo han recorrido».

El líder de los socialistas asturianos envió un mensaje, sin intermediarios, a la agrupación ovetense, anfitriona de la fiesta que dio el relevo a Rodiezmo. «¿Qué ha pasado en Oviedo en estos 22 años? Hemos presentado buenos candidatos, buenos proyectos, hecho una buena oposición pero hemos obtenido malos resultados», planteó Fernández, quien pidió que «se aparten y no intriguen» a los que no crean en una victoria socialista en la capital. El secretario de la FSA dio carta blanca a la AMSO ante las municipales de 2015: «Al candidato lo elegiréis vosotros mismos, sin nervios, sin tensión, sin ansiedad».

Los discursos de Javier Fernández y de la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, estuvieron precedidos de otra media docena de intervenciones en las que apenas hubo referencias directas a la situación actual por la que atraviesa la minería asturiana. Las coincidencias entre el mitin-fiesta tradicional que el sindicato minero SOMA celebraba cada primer fin de semana de septiembre en Rodiezmo se limitaron al canto de «La Internacional» y a un par más de guiños: la intervención de Gregorio Martínez, «Goyo», de la organización comarcal del SOMA, que repasó con detalle la historia del Orfanato Minero, y un cartel que rezaba «Los socialistas de Oviedo con las comarcas mineras (AMSO-PSOE)».

El diputado Antonio Trevín censuró el descenso de las inversiones del Gobierno del PP y auguró que en unas semanas las obras de la Variante de Pajares, «que van al tran-tran, estarán paradas». El secretario del PSOE ovetense, Wenceslao López, abogó por «reconocer con humildad lo que se ha hecho mal» para encarar el futuro «con mucho ánimo y mucha ética».

El portavoz municipal Alfredo Carreño afeó al alcalde Agustín Iglesias Caunedo que plantee ideas como el Museo de las Reliquias «para que las paguen otros». El eurodiputado Antonio Masip renunció a subir, apoyado en su muleta, hasta la tarima donde estaba el micrófono y, genio y figura, hizo una reflexión «a capella» sobre las elecciones en Alemania y también sobre las europeas, en las que no sabe si revalidará su escaño porque «decide el partido y ulteriormente el apoyo ciudadano». Luego dio la palabra al secretario de las Juventudes Socialistas locales, Alejandro Delgado.

El remedo de Rodiezmo contó con numerosos dirigentes socialistas en activo, como las diputadas Maria Luisa Carcedo y Mariví Monteserín y el senador Vicente Álvarez Areces, a quien Javier Fernández agradeció su empeño en el proyecto del Hospital Universitario Central de Asturias. El ex delegado del Gobierno Manuel Ponga y el ex diputado Álvaro Cuesta se sumaron a una fiesta animada por el grupo Nocéu, que interpretó el «Asturias patria querida» antes de que por megafonía sonase «La Internacional».

Puertas afuera, y observado por la Policía, un grupo de representantes de la plantilla de Liberbank desplegó una pancarta contra el ajuste laboral en el banco y pitó a los dirigentes que accedían al Fundoma.