Aurelio García Bermúdez, presidente de la Red Española de Desarrollo Rural y de la Red Extremeña, ex alcalde de Hoyos (Cáceres) y ex asesor del anterior presidente de Extremadura Juan Carlos Rodríguez Ibarra, está considerado uno de los más aventajados conocedores de las comarcas del campo español. Hoy analizará en Oviedo el futuro de estas áreas, en el debate sobre el nuevo eje de las ayudas europeas Leader para el periodo 2014-2020, organizado por la Red Asturiana que preside el alcalde de Somiedo, Belarmino Fernández. En esta entrevista, adelanta que, ante el recorte de fondos europeos, las administraciones deberán aumentar sus aportaciones.

-Entre 2014 y 2020, la financiación nacional mínima obligatoria del eje Leader pasará del diez por ciento de los fondos de desarrollo rural asignados a España a un cinco por ciento. ¿Habrá dinero para todos?

-De mano, en la Política Agraria Comunitaria (PAC) ya contamos con un poco menos de dinero para desarrollo rural. Entre 2007 y 2013 tuvimos 8.000 millones, en el siguiente periodo serán unos 7.300. La financiación nacional actual para el Leader es de un doce por ciento. La solución para compensar sería subir la aportación mínima a un quince por ciento.

-¿Se lo han pedido al ministro Arias Cañete?

-Estamos preocupados y fuera de la agenda política del ministro. Arias Cañete deja de lado al desarrollo rural en la negociación de la PAC y se centra en negociar al más alto nivel el dinero del llamado primer pilar (las ayuda directas destinadas a ganaderos y agricultores). Son muy importantes, sin duda, pero el desarrollo rural es fundamental porque crea empleo y fija población en los pueblos.

-La Unión Europea marca los porcentajes mínimos de inversión. En tiempos de recortes, no parece probable arañar más dinero. ¿Tienen un plan B?

-Podemos buscar fórmulas. Bruselas introduce el concepto de multifondos. Si hay voluntad política en el gobierno central y en los autonómicos podrán abrirse líneas de cofinanciación para el Leader, con 264 grupos en España y 11 en Asturias. La reducción de los fondos debe compensarse con más aportación de las administraciones.

-¿La agroalimentación es el único sector con futuro en el campo asturiano?

-Ni mucho menos. En los próximos años la región no debe volcarse solo en proyectos agroalimentarios. Ahora toca buscar empresas innovadoras ligadas a las nuevas tecnologías o a la eficiencia energética. Asturias ha contribuido mucho al desarrollo rural en España desde la Red Española y ha sido uno de los ejemplos en Europa, donde hay 2.320 grupos Leader. El 54% del empleo que se crea en la UE se genera en el entorno rural.

-En el nuevo periodo cambia la estrategia de gestión de los fondos. ¿Cómo se traducirá en la práctica?

-Habrá nuevas alternativas para diseñar planes de trabajo diferenciados por zonas. Incluso, será posible poner en marcha subprogramas dirigidos a zonas de montaña o para el sector pesquero. Esa estrategia contempla también dedicar los fondos a formación o a impulsar el cooperativismo.

-¿Eso implicará menor atención a la generación de puestos de trabajo?

-Ni mucho menos. Los proyectos seguirán generando empleo.

- El período 2007-2013 que acaba fue el primero en el que los fondos Leader se incluyeron en la PAC. Una medida muy criticada.

-Sí. Y, en su día, pedimos un fondo propio. Pero entre incluirnos en la PAC o quedarnos sin nada, la decisión estaba bastante clara.